El baloncesto femenino español en silla de ruedas estará en unos Juegos Paralímpicos 28 años después. Tras Barcelona 92, en el que participó como anfitrión, España consiguió clasificarse por méritos propios por primera vez en su historia tras su cuarto puesto en el Europeo de Rotterdam (Holanda) el pasado mes de julio. Ahora, las chicas que dirige Abraham Carrión vuelven a reunirse para iniciar su camino hacia Tokio 2020.

La primera concentración de la temporada la llevarán a cabo del 6 al 8 de diciembre en Daganzo de Arriba (Madrid), escenario que sirvió de preparación para el campeonato continental. Hay previstas cuatro sesiones de entrenamientos para ver cómo llegan las jugadoras que estuvieron en el Europeo, que en este inicio de curso están disfrutando de minutos en sus respectivos clubes tanto en División de Honor como en Primera y Segunda División.

Carrión ha convocado a 11 de las 12 jugadoras que disputaron el Europeo, con la única baja de Judith Núñez por lesión. Estarán Lourdes Ortega y Michell Navarro (BSR Amiab Albacete), Lucía Soria y Veva Tapia (Casa Murcia Getafe), Sonia Ruiz, Beatriz Zudaire y Vicky Alonso (UCAM Murcia BSR), Sara Revuelta y Vicky Pérez (CD Ilunion), Andrea Santana (Ademi Tenerife) y Agurtzane Egiluz (Zuzenak), aunque ésta última no podrá entrenar porque acaba de ser operada de la cadera.

A ellas se les unirá cinco novedades: Isabel López (Fundación Grupo Norte), que ya tiene la nacionalidad española, las jóvenes Naiara Rodríguez (Zuzenak), Uxía Chamorro (Iberconsa Amfiv) y Marta Moreno (Escuela CD Ilunion), así como María Blanco, que jugaba en Canadá al baloncesto a pie por una beca de estudio y le surgió una lesión rara en la rodilla. .

Para Carrión, ninguna tiene su puesto asegurado y todas tienen opciones de estar en la cita japonesa del próximo año.