El entrenador del Real Valladolid, Sergio González, insinuó ayer que podría haber cambios en el once titular que se presente mañana en Balaídos. No ha dado ninguna pista al respecto, puesto que en los entrenamientos ha realizado "diferentes pruebas" para "jugar al despiste", mientras trata de sacar el mejor rendimiento de los jugadores, de cara a un choque "importante".

El objetivo es "ir sin complejos, mostrando la misma imagen que se ofreció ante el Sevilla, pero con matices, buscando más finalización", explicó el técnico catalán.

"El Celta es un buen equipo, muy compensado, con buenos futbolistas, que juega un 4-4-2 en defensa y un 4-3-3 en ataque, que tiene buena combinación por fuera, con Sisto en la delantera, que es un jugador muy vertical y bueno en el uno contra uno", analizó sobre el cuadro vigués el preparador blanquivioleta, del que dijo que "se está reencontrando ahora". Una forma de contrarrestarles será "tener continuidad en el juego y defender y atacar como un grupo compacto", apuntó.