La selección española de balonmano tuvo que conformarse con la segunda plaza en la Golden League, al caer por 5-3 ante Francia en Aalborg (Dinamarca) en la tanda de penaltis, tras una batalla de estilos que acabó en tablas (31-31).

El empate obligó a españoles y franceses a jugarse el título en la tanda de penaltis, donde el equipo francés se hizo con el triunfo tras una parada de Wesley Pardin a lanzamiento de Valero Rivera. La derrota no empaña el papel del conjunto español en la Golden League, posiblemente el torneo amistoso más prestigioso del mundo, donde los de Jordi Ribera demostraron que están en disposición de pelear por todo en el próximo Europeo.