El judoka Nikoloz Sherazadishvili, del Famu vigués, regresó a lo más alto del podio, tras imponerse al cubano Iván Silva en la final de la categoría de hasta 90 kilos del Grand Slam de Brasilia.

En la repetición de la final del Mundial de Bakú 2018, Sherazadishvili volvió a derrotar al cubano, número cinco de la clasificación mundial, aunque en esta ocasión sin necesidad de tener que acudir a la "técnica de oro" tal y como ocurrió en la capital de Azerbaiyan.

Si en Bakú el judoka con licencia por la Federación Gallega forzó el tiempo extra con un "waza-ari" a falta de cuarenta segundos para la conclusión, en Brasilia, Nikoloz se alzó con el triunfo tras lograr un "waza-ari" a falta, igualmente, de cuarenta segundos para la finalización del combate.

Un oro que reafirma Sherazadishvili en la primera plaza de la clasificación mundial de la categoría de hasta 90 kilos y, sobre todo, que servirá a Sherazadishvili para resarcirse de la decepción sufrida en los pasados Mundiales de Tokio en los que el español no pudo retener su corona universal, tras caer en la tercera ronda ante el francés Axel Clerget.

Pero esta vez Nikoloz, de 23 años, se mostró intratable en Brasilia como demostró su imponente camino hacia la final, tras imponerse por "ippon" al canadiense Mohab Elnahas, al italiano Nicholas Munga y al sueco Marcus Nyman.

Una trayectoria que el judoka español culminó con su victoria ante el cubano Silva y que permitió a Nikoloz Sherazadishvili colgarse su segundo oro en una prueba de Grand Slam, tras el triunfo logrado en 2017 en Abu Dabi.

Este oro de Sherazadishvili se une a los bronces logrados por sus compañeros de equipo Fran Garrigós y Laura Martínez. María Bernabéu, en cambio, se quedó fuera de la lucha por las medallas en este Grand Slam.