El reto de Robert Moreno, nuevo seleccionador español tras la renuncia de Luis Enrique, comenzará hoy en Rumanía, donde nunca ganó España, que puede dejar vista para sentencia su pase a la fase final de la Eurocopa 2020 en sus dos próximos compromisos.

Nunca imaginó Robert que su gran momento le llegase en las actuales circunstancias. Y ha demostrado que no lo deseaba, que incluso daría un paso al lado para trabajar de nuevo codo con codo junto a Luis Enrique si el asturiano desea superar el peor momento de su vida regresando al cargo que abandonó cuando conoció la grave enfermedad de su hija.

En la distancia y delegando en el que la Federación Española ha confiado como seleccionador, abogando por la línea continuista, España ganó en Malta y goleó en Islas Feroe y a Suecia en el que se encaraba como duelo directo por el liderato. No había sido nombrado, pero ya ejercía Robert, que decidió sentar en el banquillo a De Gea. El firme camino de España lo quiere mantener en su estreno oficial. Encarando un desafío a la historia, que señala que España nunca venció en terreno rumano en seis visitas. Y lo buscará con novedades obligadas por las bajas por lesión de jugadores como Isco, Asensio y Morata. Buscará mantener el ritmo de goles, siete en sus dos últimos compromisos, con nuevos protagonistas ofensivos, excluidos Iago Aspas y Diego Costa. Llega el premio a Sarabia, el regreso de Alcácer y la continuidad de Oyarzabal.

Rumanía se juega ante España en el Estadio Nacional de Bucarest buena parte de sus opciones de clasificarse para la Eurocopa de 2020. Llega al partido como segunda del grupo, empatada con Suecia a 7 puntos, y seguida de Noruega con 5.

Para buscar la sorpresa y derrotar a España, los pupilos de un gran conocedor del fútbol español como Cosmin Contra contarán con el joven atacante George Puscas, una de las sensaciones del Europeo sub 21. Por detrás, aparecerá al media punta Razvan Marin, que se convirtió en abril en el fichaje más caro de la historia del Ajax.

La Federación Rumana de Fútbol se ha solidarizado con Luis Enrique y los dos equipos lucirán brazaletes negros en señal de duelo durante el partido, que comenzará con un minuto de silencio.