La castellonense Ares del Maestrat acogerá la segunda llegada en alto consecutiva de la Vuelta 2019, bastante más benévola que la del Observatorio Astrofísico de Javalambre, en la que los favoritos no deberían pasar excesivos apuros. Este sexto viaje de la 74ª Vuelta llevará al pelotón desde la localidad turolense de Mora de Rubielos hasta Ares del Maestrat con 198,9 kilómetros, la segunda más larga de estos veintiún días, con cuatro puertos de montaña, tres de tercera categoría y uno de segunda.

Jornada de nuevo por carreteras estrechas y sin apenas tramos de descanso. Ninguno de los cuatro puertos de la jornada destacan por contar con rampas muy exigentes, aunque la presencia del puerto de Culla, a solo 25,5 kilómetros del final, unido a la ascensión final de 7,9 kilómetros, puede convertirse en una buena opción para intentar hacer saltar la sorpresa.