Hace poco más de una semana, el ourensano Borja Fernández se despedía del fútbol sobre el césped del nuevo José Zorrilla de Valladolid. Le aguardaban unos días de felicidad en Ibiza, promesa cumplida por el presidente, Ronaldo Nazario, por conquistar la permanencia. Nada hacía presagiar lo que se le venía encima. Ayer, el exfutbolista fue detenido por presuntamente formar parte de una organización dedicada a amañar partidos. Después de declarar ante la policía en una comisaría vallisoletana, en la calle Gerona, fue trasladado a Madrid a última hora de la tarde. Allí esperará el momento en el que, mañana, prestará declaración ante el juez, en Huesca. Porque en la localidad oscense empezó todo, a raíz de una denuncia de la Liga de un partido de Segunda de la temporada pasada, el Huesca-Nástic, con los aragoneses ya ascendidos y los catalanes jugándose la permanencia. Detectó el organismo que dirige Javier Tebas un número de apuestas exagerado al 0-0 en el descanso y 0-1 al final. Se cumplió. La Policía asegura que los involucrados en los amaños recibían unos cien mil euros por cada tongo.

Ahora se investiga también el recientísimo Valladolid-Valencia, 0-2. Los dos goles del Valencia llegaron tras sendos errores defensivos del conjunto pucelano, que ya tenía garantizada la permanencia, en tanto los levantinos se jugaban la última plaza para la Liga de Campeones. Sin embargo, el amaño no habría sido consecuencia de un pacto entre ambos clubes, ajenos ambos a un caso investigado por las extrañas apuestas de, al menos, un jugador del Valladolid. Por el camino queda en el aire la promesa para Borja Fernández de un cargo institucional en el club blanquivioleta una vez hizo oficial la retirada.

A primera hora de la mañana comenzaron las detenciones. Al margen de Borja Fernández, el nombre más mediático es el de Raúl Bravo, internacional con España en la Eurocopa de Portugal y supuesto cabecilla de la organización. Un tercer integrante del Castilla de principio de siglo, Carlos Aranda, es otro de los nombres, además de Íñigo López, que milita en el Deportivo, o Samu Saiz, futbolista del Getafe y como el anterior con pasado en el Huesca, si bien éste último fue interrogado en Ibiza, donde está de vacaciones, y quedó en libertad con cargos. Fueron igualmente detenidos el presidente del conjunto oscense, Agustín Lasaosa, y el jefe de los servicios médicos, Juan Carlos Galindo, a la par que registraron las instalaciones del club. Con el paso de las horas fueron trascendiendo más nombres en la que se ha denominado Operación Oikos, los de Emilio Vega, exdirector deportivo del Huesca y Córdoba; Carlos Caballero, actual jugador del Fuenlabrada y ex del Córdoba; y Carlos Martín Briones, actual jugador del Mora y anteriormente del Cariñena. Ellos tres fueron detenidos, declararon y fueron puestos en libertad. A los detenidos se les imputa pertenencia a organización criminal, corrupción entre particulares y blanqueo de capitales. Los detenidos habrían utilizado familiares directos para realizar las apuestas.

El abogado de Borja Fernández señaló que el exfutbolista ourensano "es inocente" y remarcó que todo el asunto le está produciendo un grave daño a su imagen de manera injusta. Siempre según su abogado, Borja contestó "a todo y no escurrió el bulto", a la vez que reconoció que su defendido le había mostrado su perplejidad por lo que está sucediendo ya que no entiende nada. Desveló asimismo que la mayoría de las pregunas se centraron en su relación con Raúl Bravo.

El abogado aseguró que Borja tiene el apoyo del Valladolid y señaló que el club blanquivioleta se había precipitado con el comunicado emitido, en el que remarcó su compromiso contra la corrupción. "Me hubiera gustado que hubiese sido menos aséptico", finalizó.

Lo sucedido ha causado conmoción en el fútbol ourenano. El entrenador de la UD Ourense, Fernando Currás, indica: "Espero que no sea lo que parece, que quede en nada. No es algo agradable, al ser gente conocida se amplifica. Si fuese cierto, está claro que no es ni aplaudible ni justificable".

Gonzalo Iglesias, entrenador del Ourense Envialia, recalcó: "Para mí todos tienen la presunción de inocencia, las redes sociales ya se han encargado de juzgarlo".

Manolo Codeso, entrenador del Cidade de As Burgas, remarcó: "Estoy impactado, confío al cien por cien en él, el esfuerzo de muchos años de trabajo puede irse al trastede golpe y no se lo merece".