El balonmano femenino gallego vive hoy en A Sangriña su gran cita. El Mecalia Guardés y el Godoy Maceira Porriño se enfrentan en un partido que resulta esencial en lo clasificatorio para las guardesas (que persiguen la tercera plaza para jugar en Europa) y en lo pasional para ambos conjuntos. La rivalidad, compatible con una relación cordial, volverá a trasladarse al pabellón de A Sangriña que registrará una gran entrada para acompañar a los dos equipos.
No será un derbi más. Ayer Estela Doiro, capitana del Guardés, confirmó que se marcha del Mecalia en cuanto acabe la temporada. El Rincón Fertilidad de Málaga será su destino. Como también sucede en el caso de la portera Estela Carrera que también certificó que está en sus últimos partidos con la camiseta del Guardés después de cuatro temporadas en el club. Pérdidas importantes y aunque su adiós a la gente de A Sangriña se produzca en el último partido de Liga, el choque de esta mañana es especialmente simbólico al tratarse del último derbi.
En una situación similar está la capitana del Godoy Maceira Porriño, Cecilia Cacheda, que también dejará el club al final de la temporada. La central tenía ganas de protagonizar un cambio de aires tras toda una vida defendiendo la camiseta roja del Porriño. Para ella tampoco es un derbi más el que va a disputar hoy.
"Los derbis siempre son partidos muy especiales y ya sabemos que no hay partido sencillo", apuntó Prades, que aún tiene reciente la victoria apurada en la pista del Aula Cultural de hace unos días. El equipo ya ha superado el primer paso para cumplir con su objetivo de ganar los cuatro últimos partidos de la temporada: Aula el pasado domingo. Ahora queda Porriño y Granollers y Elche en las siguientes jornadas. Con esto, las guardesas quieren llegar dependiendo de sí mismas al final para alcanzar la tercera plaza. Sobre el rival, el técnico del Mecalia detacó que el hecho de haber cerrado matemáticamente la permanencia en la categoría les hará llegar "con menos presión". Además, como recuerda Prades, en estos partidos "todas las jugadoras se motivan más y dan lo mejor". Es, sin duda, "el partido que todo el mundo quiere llevarse", afirma. Para ello, habrá que vaciarse sobre la pista pero también el club del Baixo Miño apela a la afición que siempre abarrota 'O Inferno' para que empujen durante los sesenta minutos del choque. Las únicas bajas que tiene Prades para este partido son las de Sarah Valero y Anthía Espiñeira.
El Godoy Maceira Porriño llega a este partido con la tranquilidad de haber logrado la tan ansiada permanencia en la Liga Guerreras Iberdrola el pasado fin de semana en casa ante el BM Morvedre.
Abel Estévez destacó la importancia de "salir concentradas desde el primer momento", ya que se trata "de un derbi un poco atípico, ya que nosotras en principio no tenemos un objetivo claro a nivel de clasificación, más allá de intentar ganar, mientras que ellas se están jugando el tercer puesto", explicó con respecto a la situación de ambos bloques. "Intentaremos competir lo mejor posible, aunque ellas tienen el papel de favoritas, tanto por jugar en casa como a nivel de clasificación, pero nosotros intentaremos jugar nuestras cartas y hacer el mejor partido posible", añadió. Con respecto a la disponibilidad de jugadoras para este derbi, Abel explicó que no podrá contar con las jugadoras del equipo filial, que se están jugando precisamente el ascenso a DH Plata femenina este mismo fin de semana en Porriño. Aitana Santomé será duda hasta el último momento debido a un esguince de tobillo, mientras que Begoña Otero sigue pendiente del diagnóstico de su rodilla.
