El fiscal ha acordado que se juzgue al futbolista Gabriel, el Toro, Fernández, por el atropello a finales de diciembre pasado en la capital uruguaya de una joven de 18 años que se mantiene en estado de coma. Según informaba ayer el programa Así nos va, de Radio Carve, no se solicitará prisión preventiva para el jugador fichado por el Celta y que actualmente juega en Peñarol por considerar que no existe riesgo de fuga.

Según la misma información, las pruebas periciales arrojan datos como que Fernández conducía a 60 km/h en una zona limitada a 45 y que la joven cruzó la calle correctamente. El fiscal Alejandro Machado, que ha pedido el procesamiento judicial contra Gabriel Fernández solicitaría una pena de entre 20 meses de prisión y una máxima de 8 años.

La Fiscalía de Montevideo impuso en febrero medidas cautelares contra el último fichaje del Celta de Vigo que implicaban restricciones para viajar. Entonces, se le imponía la prohibición de salir de Uruguay en 90 días sin autorización judicial. Fuentes del caso no descartan que, si la mujer fallece, Gabriel Fernández pueda ser acusado de homicidio culposo, lo implicaría privación de libertad y otras medidas que comprometerían su viaje a Vigo el próximo semestre. De momento, el jugador solo podrá salir de Uruguay para disputar partidos internacionales con Peñarol en la Copa Libertadores, si la jueza que lleva el caso lo autoriza.

El informe pericial publicado a principios de año concluía que el atropello se produjo "en una zona delimitada como cruce peatonal o en la inmediatamente anterior o subsiguiente de la misma". El perito indica asimismo que el accidente "se debió a un factor humano" y atribuye la culpa del mismo "al conductor del auto, el cual circula a una velocidad excesiva embistiendo al peatón" que, según reporta el informe, cuenta con preferencia de paso.

Las marcas de frenado permiten concluir al perito judicial que Gabriel Fernández circulaba a una velocidad aproximada de 60 kilómetros por hora en una zona delimitada a 45. El informe destaca asimismo que tras el atropello el jugador "una maniobra evasiva compleja de frenado y viró a la izquierda, invadiendo la senda de circulación en sentido contrario para luego retornar hacia su senda hasta detenerse".