"Histórico". Esa fue la palabra más pronunciada por las jugadoras, miembros del cuerpo técnico y directivos después de que el Barcelona se convirtiera en el primer club del fútbol español en clasificarse para una final de la Liga de Campeones femenina.

Supo sufrir el equipo azulgrana ante el Bayern de Múnich (1-0) y, cuando la colegiada pitó el final del partido, los 12.764 espectadores presentes en el Miniestadi estallaron de alegría para celebrar un hito del fútbol español.

"Es un premio. Hemos hecho historia nosotras, pero todo el fútbol femenino español está detrás. Creo que esto es un gran paso para todas", valoró visiblemente emocionada Alexia Putellas.

El equipo azulgrana planteó un encuentro de equipo maduro, sobreponiéndose al planteamiento atrevido de su rival y a la expulsión de Hamraoui en el minuto 71.

Pese a la presión bávara, las zagueras del Barcelona se mostraron muy sólidas. También la guardameta Sandra Paños, que sacó una mano providencial para evitar el tanto del Bayern en un testarazo. Fue precisamente la guardameta azulgrana quien aplaudió la solidez de sus compañeras, un atributo que considera clave para luchar por la final del próximo 18 de mayo que el Barcelona disputará en Budapest contra el Olympique de Lyon.

La única nota negativa del partido fue la expulsión de Hamraoui, que se perderá la final. "Está hundida, es normal", dijo su entrenador.