Inesperada derrota del Pontevedra en casa del Adarve por 3-0. Los de Luismi realizaron un flojo partido y en apenas tres minutos vieron como los madrileños a través de Berodia de penalti y Álvaro Sánchez aprovechaban los fallos defensivos para encarrilar el partido. Ángel sentenció en el último suspiro del encuentro. El Pontevedra no pude fallar más en el tramo final de campeonato ya que el resto de equipos no lo van a hacer.

El conjunto granate, hoy de azul, planificó un encuentro de desgaste en el que quería aprovechar la necesidad local de puntuar para evitar el descenso. La primera ocasión clara de gol para el Pontevedra llegaría en el 14 tras una buena jugada personal de Borja Domínguez y su centro al área no fue rematado correctamente por Bustos a puerta vacía. Esta ocasión dio el empuje necesario al Pontevedra para comenzar a dominar el balón y encerrar al Adarve en su campo.

Pero el Adarve no estaba muerto aún. En el minuto 21, penalti de David tras derribar a Álvaro Sánchez dentro del área que Berodia transformaba a la izquierda del meta Edu. Ahora quedaba por delante intentar remontar el encuentro, algo que se hace muchos años, desde 2015, que los de Pasarón no lo hacían. Y si le sumamos que en el 25 Adrián León dejó corta una cesión de cabeza y Álvaro Sánchez sólo tuvo que empujarla a gol, todo es más difícil.

Con el 2-0 en apenas tres minutos, Luismi veía atónito como el Pontevedra había desaparecido del césped artificial y estaba a merced de los madrileños. Pidió cabeza y tranquilidad el técnico visitante ya que todavía quedaba mucho partido por delante. Sin embargo, el Adarve perdonaba el tercero una y otra vez aprovechando la debilidad y desorden en la zaga visitante. Juanma de cabeza y Álvaro Sánchez rematando al larguero fallaron ante Edu dejando el 2-0 camino de vestuarios.

No le tembló la mano a Luismi para buscar la reacción y sentó en el banquillo para la segunda parte a Pedro y Romay por Álex González y Arruabarrena. Necesitaba algo nuevo para un Pontevedra que había naufragado en la primera parte. Se mostraba un Pontevedra mucho más incisivo y con una presión alta que encerró al Adarve en su campo.

En el 66 hubo un punto a favor del Pontevedra con la expulsión de Rico al ver la segunda tarjeta amarilla. Había tiempo para la reacción y el posible rescate de un punto. A los dos minutos, una falta en la frontal del área que Borja Domínguez enviaba por poco por encima del larguero.

Por mucho que lo intentaba el conjunto pontevedrés, tanto el tiempo como el Adarve jugaban en su contra lo que propició muchos errores y fallos por precipitación. En uno de ellos Ángel lograba de fuerte zurdazo raso el contundente 3-0 que frenaba en seco la excelente trayectoria del Pontevedra.

Ficha técnica:

Adarve: De las Heras; Ángel, Souza, Juanma, Jordi; Rico, Olmedo, Darío (Escobar 92’); Álvaro Sánchez, Adighibe (Garci 74’), Berodia (Miñambres 91’).

Pontevedra: Edu Sousa; Nacho, Víctor, Adrián León, David (Pibe 73’); Berrocal, Borja Domínguez; Pedro (Álex González 46’), Romay (Arruabarrena 46’), Bustos; Javi Pazos.

Goles: 1-0, (22’) Berodia (pen.). 2-0, (25’) Álvaro Sánchez. 3-0, (90’) Ángel.

Árbitro: Sánchez Sánchez (colegio extremeño). Amarilla a Adighibe; David, Víctor. Amonestó en el banquillo al visitante Fernández. Expulsó al local Rico (66’).

Incedencias: García de la Mata. Unos 580 espectadores.