El Coruxo vuelve al campo de O Vao con la mente puesta en la última plaza que clasifica para la próxima edición de la Copa del Rey. Además, los de O Vao acumulan diez jornadas consecutivas sin conocer la derrota, lo que le permite marcarse incluso un objetivo más ambicioso.

El partido de esta tarde es una buena prueba de fuego para medir las aspiraciones de los vigueses. El San Sebastián de los Reyes ocupa la tercera plaza, a tan solo dos puntos del líder. Además, se muestra como uno de los equipos más goleadores del grupo, por lo que no cabe duda de que es un compromiso tremendamente complicado.

El equipo cerró la preparación del encuentro en la mañana de ayer en el campo Val do Martín de Baiona. Los vigueses querían cerrar la preparación en un campo de hierba natural y no usar el de O Vao para que esta tarde esté en buenas condiciones. Dadas las buenas relaciones que mantienen con el Erizana, decidieron irse a Baiona. Una última sesión muy suave, en donde los jugadores realizaron algunos ejercicios físicos, para cerrar el entrenamiento repitiendo el plan de partido que tienen previsto utilizar esta tarde ante los madrileños, en un partido exigente y que puede marcar un gran futuro para los jugadores verdes.