Fabril y Coruxo firmaron un empate que supo a poco a ambos, aunque quien realmente hizo más méritos para llevarse la victoria fue el equipo de Luisito. El conjunto vigués, que encadena 10 partidos sin perder, no supo sacar provecho de la acuciante situación del filial herculino, que llegaba a la cita casi sentenciado, con tres derrotas seguidas y tras cuatro jornadas sin ganar, y se mostró excesivamente especulativo ante la superioridad en el juego del conjunto blanquiazul.

Al filial deportivista no le quedaba más opción, si quería alimentar sus mínimas opciones de salvación, que conseguir un triunfo para que pudiera servir de punto de inflexión para su remontada.

Ante un Coruxo reservón, sin prisas y que trató de jugar con la ansiedad del rival, el conjunto de Luisito no tardó en controlar la pelota y el juego, aunque el primer susto para los pupilos de Jacobo Montes fue por un error propio. Una cesión de Sergio Rodríguez, incómoda y con bote, hacia su portero Alberto, despejó como pudo. La pelota golpeó en Uxío y se marchó fuera.

El mando del encuentro era del Fabril, el Coruxo apenas había pasado del centro del campo con el balón controlado. Todo parecía encaminado a un 1-0. Cosas del fútbol, llegó el 0-1 en la primera aproximación destacada del conjunto olívico a la portería de Álex Cobo. Samanes realizó un cambio de orientación de juego hacia Mateo, quien controló el esférico y sirvió desde la derecha un centro medido al área. Manu Justo, muy atento, se anticipó a los centrales fabrilistas y remató con comodidad de cabeza la pelota al fondo de las mallas.

El gol reforzó la idea del Coruxo de aguantar y asestar el siguiente golpe en una contra. Y fue el Fabril quien siguió llevando, más necesitado aún, el peso del encuentro. Contrajo méritos para marcar. Sin embargo, no estuvo certero de cara a puerta. May dispuso de dos ocasiones muy claras. Primero sorteó a varios rivales y cuando encaró a Alberto se topó con la buena salida del cancerbero, que envió la pelota a córner. En ese saque de esquina, el propio May cabeceó libre de marca y la pelota se perdió a una palmo del palo derecho.

Manu Justo, con una volea desde la frontal del área grande, abrió las hostilidades en el segundo tiempo. Luisito, con el partido algo alicaído, trató de revitalizarlo con dos cambios antes de cumplirse la hora de juego.

Encontró el premio el Fabril en un nuevo saque de esquina. No lo despejó bien Samanes y Abeledo no desaprovechó la concesión.

Y el Coruxo recurrió a Silva, antes había entrado Juanpa, para irse, esta vez con más decisión, a por el encuentro. Remató con peligro al poco de entrar y Álex Cobo retuvo el disparo sin apuros. En la otra portería, el intento de Jonathan Montiel, tras una buena acción personal, acabó en las nubes.

Había adelantado ya las líneas de presión el conjunto verde y el Fabril, por su parte, intensificaba sus ofensivas. Ni Silva, en un lance que dejó maltrecho para los minutos finales a Manu Justo, ni Víctor García concretaron las últimas ocasiones de un encuentro en el que el punto supo a poco a ambos.