El Pontellas, con paciencia y trabajo, venció por la mínima en un encuentro en el que generó varias ocasiones manifiestas de gol en las que les faltó serenidad para conseguir un resultado más contundente ante un Marcón resistente y bien plantado sobre el terreno de juego que intentó la igualada en el tramo final pero sin concretar verdadero peligro para el meta local.

Primer tiempo de dominio e iniciativa local donde con la posesión del esférico trataba de realizar distintas incursiones en ambas bandas sin demasiado fruto dado la buena disposición del conjunto foráneo, que a través de su seriedad en la parcela defensiva no permitió el juego fluido al que acostumbra a realizar el Pontellas. La aproximación más destacada en el minuto 42 para los locales que finalizó Diego Blanco con un disparo al borde del área que salió desviado.

En la reanudación la entrada en el terreno de juego de Lucho provoca una mayor profundidad y desequilibrio en sus llegadas por ambas bandas, logrando desigualar el marcador tras jugada individual en banda derecha con centro raso al segundo palo en área pequeña sobre Yago que trata de interceptar el defensa visitante Juan Antonio introduciendo el esférico en el fondo de las mallas y estableciendo el 1-0, a la postre definitivo en el marcador. Y a partir de ahí los hombres de Curiel ante la apertura del conjunto visitante gozó de evidentes llegadas para sentenciar el encuentro. Diferentes ocasiones en las que pudieron inclinar el partido de un modo más claro.

Al final tres nuevos puntos que mantienen vivo el sueño del ascenso a la Tercera División en una temporada donde la gestión en todos los ámbitos de un conjunto humilde esta siendo extraordinaria y admirable. Diez puntos saca de ventaja al tercer clasificado con diez partidos por delante. Un margen bastante amplio para manejar.