El Porriño PBB continúa sin cortar su racha negativa y ayer sumó en Oviedo su tercera derrota consecutiva ante un rival de los considerados de su "liga". Los porriñeses mantienen esas tres victorias de ventaja sobre la última plaza de descenso, pero no son capaces de lograr esa victoria que ponga la proa hacia la salvación definitiva.

El equipo no estuvo bien ayer en Oviedo. Los jugadores salieron centrados al partido y esa circunstancia la aprovechó el cuadro asturiano, que había resuelto su ventaja en los primeros diez minutos de juego. Su acierto desde la línea exterior les permitió lograr siete triples, que ampliaron la ventaja hasta los diez puntos al finalizar el primer cuarto.

Las cosas no mejoraron en los siguientes minutos. Los asturianos estaban lanzados, y los porriñeses seguían a medio gas, intentando reaccionar pero sin la convicción suficiente como para remontar el encuentro. De hecho, el segundo cuarto volvió a favorecer a los asturianos, que al descanso ganaban de diecinueve puntos (52-33).

El paso por el vestuario no mejoró las sensaciones de los porriñeses, que continuaron a remolque de un conjunto asturiano que lo estaba haciendo bien en defensa, logrando dejar al equipo entrenado por Jenaro Alonso en el cuarto con tan solo nueve puntos. En ataque el equipo seguía funcionando, lo mismo que su tiro exterior, logrando al final del encuentro 15 triples de 33 intentos.

En el último cuarto, y con todo resuelto, el Oviedo comenzó a hacer rotaciones dándole minutos a los jugadores que menos cuentan en el equipo. Ahí fue el momento en el que el Porriño PBB logró mejorar un poco su imagen, llevándose el cuarto por seis puntos, 18-24. El próximo fin de semana, los porriñeses visitan a un Culleredo que lidera la competición.