Un gol de Rodrigo Moreno al principio de la segunda mitad metió al Valencia, que había igualado en la ida a dos tantos, en la final de la Copa del Rey en un choque en el que el contragolpe local pudo con el dominio territorial visitante.

El rival del Barcelona en la final salió de un partido entre dos estilos muy diferentes en el que el Betis tuvo más oportunidades en el primer tiempo y el Valencia aprovechó la suya en la segunda parte.

La balanza se decantó a favor del equipo local tras un ataque de Piccini. El balón llegó a Gameiro, que cedió a Rodrigo, para que éste hiciera el 1-0 en el minuto 56. Tras el tanto, que fue revisado por el VAR, el Valencia cogió algo de impulso y se hizo con el balón que no había tenido en todo el primer periodo, tras lo que el técnico visitante, Quique Setién, dio entrada a Loren en ataque por el defensa Francis.

Sin embargo, el Betis se recuperó del golpe recibido y volvió a tener el balón, aunque el Valencia también encontró a la contra opciones para hacer el segundo tanto. Al final, el Valencia aguantó las arremetidas del Betis, que reclamó un penalti ya en tiempo de prolongación, pero sin tener opciones de empatar el encuentro.