- Esta es su primera visita a Vigo tras el cambio en la presidencia de la Federación Gallega.

- Esta visita es importantísima porque tenemos un Mundial ya a la vuelta de la esquina, pero también porque es mi primera visita con el nuevo equipo de gobierno de la Federación Gallega y es una forma de interesarme por ver el estado, la situación, los nuevos proyectos que se plantean. Ya conocía el estado de salud de la Federación Gallega con su anterior presidente, José Luis Pérez Ouro, y ahora con Bruno López he percibido la ilusión con la que cogen las riendas de esta federación para dirigir los sinos del balonmano gallego en los próximos cuatro años.

- ¿Qué le pareció la decisión de Bruno López de postularse para ocupar la presidencia?

- Fue una sorpresa, pero es la persona que debía liderar un nuevo proyecto por sus conocimientos, sus aptitudes y por su trabajo. Ha estado trabajando y colaborando con la Federación Española y estoy enormemente satisfecho porque ha demostrado su valía.

- ¿Qué lectura hace tras esta primera toma de contacto?

- Vamos a estar trabajando codo con codo para intentar mejorar todo lo que se pueda dentro del balonmano gallego. Va a tener a la Federación Española a su disposición como estaba, como está y como estará siempre, pero sí que también vamos a exigir esfuerzo, sacrificio y, sobre todo, que el balonmano gallego siga creciendo y que esta nueva etapa llena de ilusión se pueda desarrollar de una forma más tranquila y de cooperación. Lo que he visto es un ambiente de ilusión, de energía, de trabajo y, sobre todo, con una opción clara de mirar hacia el futuro para crecer.

- Ahora se enfrenta a un reto mayúsculo con este Mundial júnior.

- Sí. Todos los focos del balonmano mundial estarán aquí puestos. Es una prueba fundamental porque volvemos a rememorar 30 años después lo que fue aquel Mundial que se disputó aquí en España. Fue un éxito de público, de organización y, sobre todo, fue el punto donde nuestro balonmano dio un paso adelante para seguir creciendo. Además, este campeonato es la antesala de los futuros 'Hispanos' y de los equipos nacionales de los demás países. Vamos a reunir a 24 selecciones de un altísimo nivel y nuestro trabajo va a consistir en que todo el mundo conozca, vea y disfrute Galicia. Debemos mostrar qué es Galicia para el balonmano y lo que significan Vigo, Pontevedra y la Diputación de Pontevedra para este deporte. Tengo que destacar en este sentido al Concello de Vigo y a su alcalde y a Pontevedra y a su alcalde, así como a la presidenta de la Deputación, como parte fundamental para el desarrollo de este Mundial.

- ¿Qué ha pesado más en la elección de Vigo y Pontevedra como sedes?

- Su esfuerzo, su sacrificio y, sobre todo, su trabajo para el deporte. Están haciendo un gran trabajo para que el balonmano y el deporte sigan creciendo y por hacer de Vigo y Pontevedra unas ciudades más internacionales.

- En anteriores eventos aquí celebrados ya se ha demostrado la capacidad organizativa de esta federación.

- Como reza el dicho: 'Galicia Calidade'. Calidad en todos los aspectos y en la forma de desarrollar los eventos. Lo que prima aquí en Galicia es sobre todo el trabajo, el voluntariado y el esfuerzo de los que hacen que día a día esto crezca. En este punto tengo una deuda con el voluntariado de Vigo de hacer una cena para agradecerles su esfuerzo en el Campeonato de España de Selecciones Autonómicas y en el Torneo Internacional de España.

- ¿En qué punto se encuentran los preparativos del Mundial?

- Ahora estamos en la fase de definición. Ya hemos pasado la fase de estudio y ahora toca ya pisar un poquito más el acelerador. De momento estoy contento porque estamos trabajando a buen ritmo y se van atando ya muchas cosas.

- ¿Ya se sabe qué ciudad acogerá la final?

- Estamos ahora en conversaciones con ambos concellos para definir dónde va a ser la ceremonia de apertura, la de clausura, la final, dónde jugará España más partidos, la fase de grupos? Yo quiero que sean los propios ayuntamientos los que decidan. Vamos a hablar con ellos y en las próximas semanas ya sabremos el calendario, cómo se va a estructurar y dónde jugará España. Lo que quiero es que haya buen ambiente y que sea una decisión consensuada, que veamos todos los parámetros y tomemos la decisión más oportuna y mejor para la visibilidad de nuestro deporte.

- ¿Influirá la decisión en el informe que realicen los técnicos de la IHF?

- También. Verán cómo van las pequeñas remodelaciones que se han pedido en la primera visita en los distintos pabellones. Tanto Vigo como Pontevedra están en la predisposición plena de realizar dichas mejoras, que no son costosas pero sí necesarias para para hacer un evento con garantías. También vamos a ofrecer una oferta hotelera mayor. Va a ser una asistencia más que importante y vamos a dar una cuota importantísima de ocupación, sobre todo en Vigo, donde tenemos más oferta hotelera y donde tenemos que intentar que todo el mundo venga y disfrute con este evento.

- ¿Qué papel está llamado a hacer el equipo español en este Mundial?

- Pues ojalá seamos medalla de oro. Venimos de ser los campeones del mundo en Argelia y esta generación viene quizá con otras características, pero estoy seguro de que el ADN hispano volverá a salir, más aquí en nuestra casa, con el aliento de Galicia, de Vigo y Pontevedra. Intentaremos luchar por llegar a lo máximo.