Sin fuerzas, exhausto. Así llegó a la cima el atleta de Negreira Luis Calvo, que adelantó a Maikel Rodríguez en los metros finales de la carrera para imponerse en la que era su primera participación en la peculiar Subida ao Castro.

"Me animé a venir al tener el fin de semana libre", indica. "Me gusta mucho venir hasta Vigo porque vengo mucho por trabajo y tengo gente conocida aquí. Así que pasé una buena mañana practicando deporte, visitando amigos y la ciudad y pasándolo muy bien, aunque con un sofoco muy importante", dijo nada más cruzar la meta.

Su experiencia en O Castro le recordó viejos tiempos, cuando participó en la subida al Empaire State. "Me esperaba algo parecido. Participé en alguna prueba del circuito europeo y mundial de carreras de escaleras y subí el Empaire State y me valió para recordar un poco las sensaciones", asegura.

Para Luis Calvo, esta prueba tiene también un "encanto especial", sobre todo en el tramo que discurre por el Casco Vello.

Calvo cree que "el momento más crítico de la prueba es al final, porque tienes que darlo todo". Pero ayer, para él, el más duro fue "quizá al poco de empezar las escaleras porque iba segundo, a unos doce segundos del primero más o menos, y ahí tuve que hacer un sobre esfuerzo importante para cogerle. Eso se acusa mucho al final. La dureza del final viene condicionada por lo que apuras al principio", indica.

Fue a los pies del monte de O Castro cuando tomó la delantera. "Con la ilusión de luchar por la victoria siempre vienes, después, la mayoría de la veces, te das de bruces con la realidad y acabas como puedes. Pero con la intención de hacerlo bien siempre vienes, la ilusión que no falte nunca", dice el corredor que ya anuncia que "quizá repita porque es una carrera muy bonita en la que disfrutas mucho y no te deja mazado para el resto de la semana, o eso espero", bromea aún con ánimo para bromear.