Primer minuto del segundo tiempo. Tres robos de balón de España, profusión de goles sin portero... Qué alegría. Deben retirar esa modificación del reglamento cuanto antes. No se está consiguiendo en absoluto lo que se pretendía. Se viola el principio de igualdad que debe regir el juego. Se fomenta la excesiva agresividad de las defensas. Y hay tácticas que acaban generando situaciones difíciles de digerir para el espectáculo. La IHF puede efectuar cambios en la normativa cada cuatro años y me consta que se lo están planteando de cara a los Juegos de Tokio. Ayer incluso Raúl y Parrondo, los técnicos de Macedonia, tuvieron que acabar renunciando a su siete contra seis, que incluso era siete contra cinco en caso de exclusión española, con el 12-18.

Los entrenadores españoles de la selección balcánica habían querido quitar presión a sus jugadores diciendo que su partido no era el de ayer contra España sino el de hoy contra Islandia. Tienen razón. Pero al menos fueron capaces de competir hasta ese punto de ruptura tras el descanso. Lazarov hizo daño y la primera línea española comenzó tirándose hasta las zapatillas en ataque.

Pérez de Vargas comenzó a ganar el partido con sus paradas, de la misma manera que Macedonia se mantuvo dentro gracias a las paradas de su portero y los palos. Se ganó con claridad, pero conviene afinar defectos. No se pueden fallar tantos lanzamientos, aun cogiendo los rechaces, ni cometer tantas pérdidas de balón. Jordi debe dejar de insistir en las acciones de fly justo después de cada tiempo muerto -salió mal antes del descanso, aunque acabase en gol por suerte-, una situación que todos los rivales conocen. Y hay que cuidar absolutamente todos los detalles, que en partidos igualados contra rivales más poderosos pueden ser decisivos. Si contra Japón se sufrió una exclusión por emplear un jugador de más, ayer el médico entró demasiado rápido a atender a Guardiola, que se levantó sin ningún tipo de problema. Al no haber exclusión del contrario, Guardiola no pudo actuar durante tres posesiones. Imaginemos jugarnos las medallas en las últimas acciones sin Guardiola en el centro de la defensa...

Una alegría particular que me ha dado este Mundial: ver árbitros portugueses. Recuerdo cuando trabajaba con ellos, sobre todo en cuarta feira (miércoles), algunas veces en Lisboa, otras en Leiria. Aparte de entrenarlos y darles charlas, tenía una liga con ellos. Uno de esa época está además ejerciendo como mesa.

Y una pena: la Asobal es la tercera liga más representada en el Mundial, después de la Bundesliga y la Liga Francesa. Pero once jugadores internacionales franceses campeones del mundo juegan en su liga e igual número de alemanes en la suya. Los cinco españoles juegan en el Barcelona y solo Adrián Figueras en el Granollers; el resto, jugadores de Argentina, Brasil, Chile, Serbia? Antes los mejores jugaban en España.

Empiezan los partidos de verdad para la selección. El de Croacia será clave para luchar por las medallas. Hemos visto el nivel de Francia y Alemania en su empate. Dos selecciones tremendamente duras, sobre todo Alemania. La lesión de Sorhaindo va a precipitar la reaparición de Karabatic. Lo ha anunciado L'Equipe. Ahora puede ser otra Francia.