Alondras y Pontevedra disputaron ayer un encuentro de urgencias por ambos bandos. Se lo acabaron llevando por la mínima los visitantes dejando a los cangueses muy tocados en la clasificación.

El Alondras fue de más a menos, pues empezó dominando pero, a la media hora de juego, el gol de Samuel fue un golpe muy duro para el conjunto local. El tanto llegó tras un robo del Pontevedra en el medio del campo, una pared y un pase largo que dejó a Samuel solo delante del portero Manu. Silva y Raúl tuvieron ocasiones para el Alondras antes del descanso, pero sin acierto.

En la segunda parte el peso de la necesidad de puntuar se sintió en las piernas del Alondras, que no supo deshacer el entramado defensivo del Pontevedra. Los capitalinos dieron un paso atrás para amarrar el resultado y tampoco crearon mucho peligro, aunque supieron mantener el orden y sumar tres puntos de oro ante un rival directo.

Los cangueses subieron un puesto pese a la derrota y son penúltimos, gracias a la goleada que encajó el Colindres ante el Deportivo. Sin embargo, tienen la salvación a 12 puntos y la empresa se antoja casi imposible. El Pontevedra, por su parte, todavía está a ocho puntos de salir del descenso.