Bouzas y el "rapidismo" comienzan a creer en la salvación, sobre todo tras la victoria ante uno de los equipos llamados a pelear por el ascenso de categoría. Un encuentro con muchísimo sufrimiento, en donde Brais, el guardameta aurinegro, fue el jugador más destacado del encuentro.

Michel Alonso volvió a repetir el "once" inicial que hace siete días había derrotado al Unionistas. La decisión fue refrendada por el equipo nada más ponerse el balón en juego. Fue una típica jugada del Rápido, con balón en largo sobre la espalda de los centrales y en esta ocasión apareció Javi Sánchez para enviar el cuero al fondo de las mallas. Los jugadores de la Leonesa se frotaban los ojos, pero la realidad no era otra que el Rápido iba mandando en el marcador.

Tras el paso por el vestuario, Michel Alonso optó por modificar el dibujo del equipo, retomando la defensa de cuatro y reforzando el centro del campo. La intención era clara, y pasaba por que el equipo fuera capaz de sacar el balón jugado y tener algo más de posesión de la que tuvieron en los primeros cuarenta y cinco minutos. A media hora para el final llegó el primer contratiempo con la lesión de Sergio Santos, pero en lugar de optar por reforzar la defensa Michel metió a un hombre de ataque como Carlos Pereira. Las fuerzas se igualaban. La Cultural ya no tenía tanta posesión como en el primer tiempo y le costaba llegar a la frontal del área. Evidentemente, la Cultural dispuso de varias ocasiones, pero sin tanta claridad. No obstante, tal y como había sucedido en la primera mitad, bajo palos se encontraba un Brais Pereiro muy inspirado, resolviendo todos los problemas que planteaban los leoneses.

Al final, victoria sufrida, pero muy importante, para los boucenses, que le permiten abandonar la última posición y comenzar a soñar con el milagro.