El Celta Zorka finalizó la primera vuelta del campeonato como líder invicto de las tres primera categorías del baloncesto femenino nacional. El mejor de cuarenta y tres equipos pero que, de momento, no significa nada, pues el equipo todavía no ha logrado la clasificación para la fase de ascenso, aunque mantiene tres victorias de ventaja sobre el quinto clasificado. De lo que no cabe duda es que esta primera vuelta ha dejado claro el objetivo del conjunto entrenado por Cristina Cantero, que no es otro que retornar a la máxima categoría, que nunca debió abandonar.

El equipo vigués volverá a Navia el próximo fin de semana, para iniciar la segunda vuelta del campeonato con un nuevo derbi, el que disputará ante el AD Cortegada en un partido importante para las viguesas.

Había inquietud por conocer la respuesta del equipo tras las vacaciones navideñas y los muchos días sin disputar un encuentro de competición oficial. Además, el Mataró se presentaba como un rival complicado, y la realidad es que la diferencia final, doce puntos, se alcanzó en los minutos finales del encuentro, pues hasta ese momento la igualdad fue la tónica general del encuentro.

Al Celta Zorka le costó entrar en el encuentro. Las vacaciones, el tiempo sin jugar, el rival, y un plan de viaje diferente al habitual, mermaron a un cuadro vigués que a pesar de ir casi siempre por delante en el marcador, nunca pudo alcanzar grandes ventajas en el marcador electrónico.

Juego bajo los tableros

El partido se jugaba en dos zonas. Por un lado bajo los tableros, en donde la igualdad era máxima y nadie era capaz de imponerse a sus rivales. Un aspecto en donde en esta ocasión ayudó mucho Adrienne Motley, que además de sus veintidós puntos, logró atrapar seis rebotes. El otro duelo se dilucidó desde la zona y entre dos jugadoras, las americanas Nicole Jones y Adrianne Motely. Sin lugar a dudas fueron las dos jugadoras claves del encuentro de ayer tarde.

Las viguesas lograron un mejor acierto en los lanzamientos, seleccionando mejor los tiros, lo que le permitió mantenerse por delante en el marcador. Al final del primer cuarto ganaban por tres puntos, y el segundo por cuatro, lo que dejaba el marcador en un apretado 32-39 .

El peligro en el conjunto catalán era su americana Jones, por lo que Cristina Cantero trató de arreglar la situación en el tiempo de descanso. El equipo no salió centrado, lo que permitió que el conjunto catalán comenzara a recortar la desventaja, logrando llegar al final del tercer cuarto con tan solo tres puntos de desventaja frente a las viguesas, 51-54, lo que dejaba las espadas en todo lo alto para la segunda vuelta.

Unos diez minutos finales, en donde reapareció el Celta Zorka de las grandes ocasiones. El equipo aprovechó la falta de fuelle de las jugadoras catalanas para mejorar en defensa, forzando los errores del rival, que volvía a tener problemas ante el aro vigués. Todo lo contrario de las viguesas, que crecieron a través de la defensa, logrando poco a poco ampliar la ventaja en el marcador.

Sentencia final

Las diferencias fueron aumentando hasta que el equipo vigués dejó el encuentro visto para sentencia al superar los diez puntos en el marcador y poco tiempo, con lo que se disputó un final de encuentro tranquilo, algo que no parecía posible a tenor de cómo se habían disputado los minutos anteriores. Una victoria importante en la que el equipo vigués demostró su madurez.

Con esta victoria, el equipo entrenado por Cristina Cantero cierra una primera vuelta inmaculada, con trece victorias en otros tanto encuentros. La próxima semana se inicia la segunda vuelta del campeonato, con un calendario muy exigente en las primeras semanas, en las que el equipo todavía no contará con Elo Edeferioka para ayudar en el juego interior, y esa sí que será una buena prueba de fuego para el juego de las viguesas.