El Godoy Maceira Porriño se llevó una importantísima victoria a domicilio ante el BM Morvedre con un gol de Sara Gil a falta de medio minuto para el final, poniendo así el broche de oro en su último partido en las filas del bloque porriñés. Nueve goles y el tanto de la victoria. Una verdadera barbaridad, el broche de oro a su gran etapa en el Porriño.

Comenzó el partido con una sorprendente defensa 3-3 muy presionante del BM Morvedre, que prácticamente dejaba a la primera línea del bloque porriñés en medio campo, impidiendo así mover el balón con fluidez.

Ante esta situación, las jugadoras dirigidas por Abel Estévez tuvieron que 'reinventar' su estilo de juego, con una mayor movilidad tanto de la primera como de la segunda línea, trabajando los constantes desmarques y desdobles, para desestabilizar la defensa avanzada del conjunto local.

No fue tarea sencilla, ya que se vio desde los primeros minutos de encuentro que el BM Morvedre había trabajado bien esa defensa, lo que hacía complicado encontrar huecos e igualaba el partido en los primeros instantes del encuentro.

Fue tónica habitual esa igualdad por parte de ambos bloques conforme pasaba el tiempo, ya que ni el Morvedre conseguía aprovechar ese factor sorpresa, ni el Porriño imponer su mayor experiencia, provocando que se llegase al ecuador del primer acto con un tanteador bajísimo (5-4), provocado en gran medida por la falta de acierto en los pases, unido a la dificultad para encontrar portería de ambos equipos.

Continuó el encuentro con la misma tónica durante los siguientes minutos, con los dos equipos muy parejos en cuanto a juego y ocasiones, lo que propició que la igualdad siguiese siendo la principal protagonista del duelo.

Llegó el tiempo de descanso con una mínima ventaja del BM Morvedre (8-7), un marcador que dejaba todo abierto para el segundo tiempo.

Con el inicio del segundo periodo, el BM Morvedre siguió llevando la iniciativa ante un Godoy Maceira que continuaba atascado en la defensa 3-3 de su rival, que impedía que las jugadoras del bloque porriñés encontrasen portería con facilidad.

De esta manera, el equipo valenciano seguía manteniendo pequeñas ventajas en el marcador conforme pasaban los minutos, que llegó a su máxima expresión en el minuto 34 de encuentro tras la exclusión de la jugadora del Godoy Maceira Aitana Santomé. Tras ese instante, el Morvedre logró una ventaja de tres goles (12-9), que no obstante cambiaría el signo del encuentro.

El Godoy Maceira Porriño reaccionó fulgurantemente, y a base de corazón e intensidad, pasó del 12-9 al 12-14 (minuto 43), endosando un 0-5 de parcial que dejaría muy tocado al Morvedre.

No haría sino aumentar esa ventaja para el Porriño, que encontró en la movilidad de la segunda línea y en la gran intensidad de su defensa 6-0 y la buena actuación de Fátima Ayelén bajo palos, las claves para una remontada que comenzaba a certificarse.

En el minuto 48, la ventaja de las pupilas de Abel Estévez se situaba en los cuatro tantos (14-18), e incluso a pesar de la exclusión acto seguido de Alba Dapena, no permitió que esa ventaja menguase.

Se llegaban así a los últimos 10 minutos de encuentro que serían de infarto, con un Morvedre que reaccionó a base de intensidad defensiva, y un Porriño que se volvió a ver bloqueado momentáneamente, lo que llevó al partido a una igualdad en la que el bloque local llegó a empatar el duelo a falta de un minuto para el final (21-21).

Cuando apenas restaba medio minuto para acabar, no podía ser otra jugadora, en el día de su despedida, quien con un gol suyo diese la victoria al Godoy Maceira. Sara Gil anotó el 21-22, que acabaría siendo el resultado definitivo y un broche de oro a su trayectoria en el equipo porriñés.