El Rápido de Bouzas juega esta mañana en Las Palmas por primera vez en su historia. Será ante el filial del Las Palmas, un equipo que está cuajando una buena temporada, y que está peleando por meterse en la zona de privilegio de la clasificación, que en estos momentos está a cuatro puntos.
A pesar de que la salvación no está demasiado lejos, y todavía faltan cuatro jornadas para concluir la primera vuelta del campeonato, a nadie se le escapa en el cuadro boucense que el partido de esta mañana tiene un tinte especial, puesto que si los de arriba puntúan, volverán a abrirse las diferencias y entonces la permanencia será mucho más cara. Además, el equipo entrenado por Michel Alonso cerrará el año enfrentándose a otros dos filiales, el próximo fin de semana en Bouzas ante el Atlético de Madrid B, y en la última jornada del año en Valdebebas ante el Real Madrid Castilla.
Michel Alonso no contará en esta ocasión con Youssef, Carnero, Edgar y Quico, que se han caído de la convocatoria. El resto de jugadores se desplazaron a la capital canaria, con escala en Madrid. El ambiente en el equipo es bueno, y todos los jugadores son conscientes de que están en un momento clave de la temporada. El mal resultado de la semana pasada les ha servido para darse cuenta de que si no inician el encuentro totalmente concentrados lo pagan caro, y ese es el principal objetivo para el choque de esta mañana en Las Palmas.
Michel Alonso afirmaba tras la sesión de entrenamiento de esta mañana, y antes de partir hacia el aeropuerto, que "estamos mentalizados para conseguir traernos los tres puntos en juego, pero nos vamos a enfrentar a un filial con jugadores de muy buen nivel".
El cuadro canario está siendo una de las gratas sorpresas de la jornada. Tiene una buena consistencia defensiva, y son pocos los goles que le hacen, aunque también es cierto que rentabiliza al máximo sus goles, ya que es uno de los equipos que menos tantos ha marcado en las jornadas que llevamos de campeonato.
