"Tras varias semanas en las que he arrastrado molestias musculares en el tibial de mi pierna izquierda, molestias que se han agravado una vez finalizado el Medio Ironman 70.3 de Cascais el pasado mes de Septiembre y tras las pruebas médicas pertinentes, mi equipo médico y yo hemos decidido que debo llevar a cabo un periodo de descanso para poder recuperme y estar al 100% para los próximos retos". Así anunciaba el tudense Gustavo Rodríguez, a través de un comunicado, que se acababa para él la temporada.

La lesión en cuestión es una tendosinovitis aguda, inflamación de la vaina sinovial del tendón del tibial de su pierna izquierda, una lesión que lo mantendrá apartado de los entrenamientos entre cuatro y seis semanas, por lo que le "obliga a dar por terminada la temporada 2018, impidiéndome acudir tanto al Europeo de Media Distancia de Ibiza y, sobre todo, al Ironman de Malasia, clasificatorio para el Mundial Ironman de Kona 2019.

El Mundial de Kona volverá a ser el principal objetivo para la temporada 2019 de Gustavo Rodríguez, y ya anuncia que "planificaremos el calendario en busca de lograr la clasificación para el mismo".

"La temporada 2018 ha sido larga y una de las mejores de mi carrera deportiva marcada sobre todo por los triunfos en los Campeonatos de España de Larga y Media Distancia, victorias en el Triatlón de Media Distancia de Zarautz, Logroño o Triatlón de Pálmaces", enumera, destacando también "el tercer puesto en el Ironman de Gales o el sexto puesto logrado en el 70.3 de Cascais".

Este año 2018 también se han abierto nuevas puertas para Gustavo Rodríguez, con objetivos tan ilusionantes como la oportunidad de estar en unos Juegos Paralímpicos, Tokio 2020, como guía del paratriatleta Hector Catalá, "una combinación que ya ha dado sus frutos con un 3º puesto en el Mundial de Australia".

"Ahora es el momento de descansar, planificar y retomar fuerzas para la temporada 2019, que volverá a ser dura, exigente y el momento de alcanzar los sueños perseguidos", concluye.