El Club Deportivo Estradense dio buena cuenta, ayer en el Novo Municipal, de un Bande que apenas pudo frenar el buen juego planteado por los de Alberto Mariano. El conjunto rojillo puso tierra de por medio a los 34 minutos con el primer tanto de la tarde obra de Borja, que supo ganarle la espalda a la defensa rival tras un pase de Brais Vidal y batir a Edgar. La tranquilidad para los locales llegó cuatro minutos después cuando el colegiado pontevedrés señaló un claro penalti de Pousa a Borja, que lo empujó dentro del área. Manuti no falló desde los 11 metros para anotar el segundo tanto local, marcador con el se llegó al recreo. Antes, Paulo dispuso de la única ocasión visitante, pero se encontró con un inspirado Coke, que supo desviar el disparo del delantero cuando el banquillo de Bande ya se apresuraba a cantar el tanto.

El panorama permaneció inalterable tras la reanudación. La presión ejercida por hombres como Jorge, Manuti o Borja volvió a asfixiar la zona de creación del Bande. Las ocasiones siguieron llegando para los de Mariano, que a los 72 minutos certificaban la goleada después de un córner botado por Brais Calvo que Jorge sólo tuvo que empujar situado en el segundo palo. El tanto desfondó a los ourensanos, que siguieron mostrándose romos en ataque e indecisos en tareas defensivas. El festival goleador estradense se cerró a los 77 minutos de partido con un gol fabricado al alimón entre Manuti, que filtró un balón al espacio, y Gorka, que en carrera supo aprovechar el caramelo de su compañero para superar a Edgar en su salida con un disparo raso y cruzado. Con el cuarto en el marcador, unos y otros cesaron las hostilidades sobre la hierba sintética del Novo Municipal, con un Estradense haciéndose dueño y señor de la posesión y un Bande abandonado a su suerte en un partido donde nunca tuvo opciones.