- El Celta Zorka se quedó a una canasta del ascenso en la anterior liga. ¿Ha sido fácil pasar página?

- Yo vi claro que nosotros no podíamos ascender. Si la final fuera contra otro equipo, tendríamos más posibilidades. Quedamos de la mejor manera. Tenemos unas niñas que son luchadoras y que lo dieron todo, hicieron lo imposible. Pero los astros no estaban para que ascendiésemos.

- Es cierto que era el Valencia de Juan Roig, en su cancha, que el equipo local empieza arrasando... Pero al final lo han rozado con los dedos. Y uno piensa en un par de tiros y algunas decisiones arbitrales.

- Fallamos dos triples muy cómodos. Pero tampoco podemos echarnos las manos a la cabeza ni culpar a nadie. Sí me preocupó el tema del arbitraje. Nosotros en el minuto 5 ya teníamos a nuestras dos jugadoras principales con dos faltas y ellos, con un equipo físico, ninguna. Cuando se fueron de veinte el arbitraje se hizo normal pero cuando nos pusimos cerca, otra vez: en el último cuarto al Valencia le pitan la primera falta en el último minuto. Cuando ves el partido, piensas: "Esto no era para nosotros". Es la impresión que te da.

- Al menos se han librado de Valencia y Ensino, dos adversarios poderosos. Y el Celta Zorka quiere dar un paso adelante en su ambición.

- Queremos ir a la fase de ascenso. Esa es nuestra ilusión. Con el tiempo veremos si las jugadoras se acopla bien y somos capaces de construir lo que construimos el año pasado, un equipo. Tenemos la columna vertebral bien organizada: una base excepcional que mejora cada año (Anne), una Raquel que cada día va a más, es excepcional el crecimiento de Ainhoa e Itziar nos da tranquilidad como la veterana que lo facilita todo. Ahora, si el cuerpo técnico es capaz de encauzar a los fichajes y que todo funcione, creo que tendremos posibilidades.

- A Ogoke y Minata las conocían de años anteriores. Llegan extranjeras nuevas. Es el interrogante.

- Hemos preguntado mucho en los equipos que estuvieron sobre su compromiso con las compañeras. Nosotros queremos un equipo, no una jugadora que venga a hacer sus números. Si realmente podemos tener posibilidades, será como equipo. Si no, rivales como Canarias tienen mucho más presupuesto que nosotros y nos comerían. Basamos el proyecto en la actitud, el compromiso... Lo mismo que el año pasado. Iremos partido a partido.

- ¿Ha sido fácil retener a Raquel Carrera, pese a que tenga solo 17 años?

- Tuvo muchas ofertas a todos los niveles, de mucho más dinero que el que le damos aquí. Ella tomó la decisión de quedarse, seguir aprendiendo y terminar un ciclo. Ahora depende de nosotros que se pueda quedar. Si no ascendemos, nuestro compromiso con ella podrá finalizar. No quiero meter presión, porque sigue siendo un equipo muy joven, pero habrá que dar ese paso para intentar que nuestras jugadoras importantes se queden aquí.

- Debe ser frustrante reiniciar siempre la tarea cada vez que sus principales jugadoras se van.

- Personalmente me duele. Pero no por el crecimiento de ellas. A todas las que estuvieron aquí les deseo lo mejor: Tamara, Alba Torrens, Nicholls, Araújo... Es impresionante ver cómo se acuerdan de nosotros. Yo sé que es imposible traer a Alba Torrens. Cobra mucho más que el presupuesto que tenemos. Pero sí me gustaría tener aquí otra vez a jugadoras como María Araújo, mientras estén en nuestro nivel económico. Estamos luchando cada vez más por ser un equipo de pisada fuerte, con los pies de hierro. Quiero un club que económicamente se pueda mantener independientemente de las personas que estemos.

- En la elección de refuerzos, incluso en las jóvenes, han acertado bastante en los últimos tiempos.

- Nuestro director deportivo, Carlos Colinas, y yo chocamos bastante porque somos muy parecidos. Pero es una persona que aporta muchísimo al club. Tiene las virtudes y contactos necesarios para ver a una jugadora. Ojea bien. Luego no siempre podemos traer a las jugadoras que él selecciona debido al dinero. Pero seguiremos luchando por la cantera. La "marca Celta" funciona en España. Ya hay jugadoras que nos llaman.

- Obtener patrocinios es casi más importante que fichar bien.

- Reclamamos desde hace mucho tiempo una ley de mecenazgo. Los americanos no son ni más listos ni más generosos. Apoyan a las universidades porque desgravan el 140%. Si hubiese una buena ley de mecenazgo, a lo mejor no necesitaríamos subvenciones y cada club se gestionaría sus recursos. Estamos en desventaja con los equipos del País Vasco y Cataluña, que sí tienen esa ley. Ante eso no hay nada que hacer, salvo seguir luchando. En algún momento llegará. La generosidad de nuestro patrocinadores es impresionante.

- La pasada temporada reengancharon a la afición.

- Empezamos con 400 espectadores y acabamos con una media de 1.200, con un pico de 1.600. Llenamos Navia. Nos beneficia el acuerdo con el Real Club Celta, que permite pasar gratis a sus socios. Pretendemos mejorar incluso esas entradas. Pero se tienen que dar unas circunstancias y apoyar los resultados. La gente se olvida enseguida.

- La relación con el R.C. Celta es más estrecha. ¿Regresar al seno del club debe ser el final natural?

- Es una pregunta para Carlos Mouriño. Me encantaría. El Celta de baloncesto nació dentro del organigrama del club de fútbol. Por circunstancias y peripecias llegamos hasta donde estamos. Hoy tenemos un acuerdo que es bueno para ambos. Creo que solo podemos hacerle bien al Celta e igual ellos a nosotros. Los dos nos necesitamos. Estoy convencido de que si ascendiésemos, la ayuda por parte del Celta de fútbol crecería.