Bélgica se adjudicó la victoria por 2-0 ante Inglaterra gracias a un tanto de Meunier al inicio del choque y a otro de Hazard en la segunda mitad, en el partido por el tercer y cuarto puesto que supone su mejor clasificación histórica.

La nota dominante fue la falta de competitividad y la pasividad inglesa, algo que se juntó con un tempranero gol belga anotado por Thomas Meunier y que enfiló el triunfo para su selección.

La posterior diana de Hazard fue clave para vencer en este cruce por el tercer puesto. Mientras, los llamados inventores del fútbol apenas tuvieron oportunidades para conseguir la igualada, más allá de fáciles disparos que no suponían un riesgo para Courtois.

El equipo de Roberto Martínez se impuso en una primera parte muy relajada. Meunier se adelantó a la defensa rival para acabar rematando un centro de Chadli desde la izquierda y batir a Pickford en el minuto 3. Fue lo más destacado del primer tiempo puesto que, a pesar de que Inglaterra tenía la posesión lo hicieron sin generar peligro.

Hazard era el único activo y salida que tenía Bélgica para tratar de hacer daño a los británicos, que con un desaparecido Kane se encomendaron a las combinaciones entre Loftus-Cheek y Sterling para crear algo de peligro sobre la meta defendida por Courtois. Los segundos 45 minutos fueron un monólogo de posesión inglesa, pero sin peligro real. Los contraataques de los de 'Bob' Martínez fueron los verdaderos agitadores del choque.

De Bruyne era el organizador y el que iniciaba todas las contras. Tras varias intentonas que terminaron en fracaso, incluida una que acabó con un zapatazo de Meunier que detuvo Pickford de forma espectacular, Hazard tuvo que aparecer para finiquitar el encuentro tras una gran jugada individual que acabó definiendo por el palo del portero.