La relación con los podios internacionales de Óscar Graña es toda una proliferación de encuentros. El veterano palista pontevedrés, con el oro compartido ayer con Diego Romero, alcanza la privilegiada cifra de 22 medallas en competiciones europeas y mundiales, todas ellas conseguidas junto al isleño Ramón Ferro, ya retirado.

La dupla junto a Romero ha servido para ampliar su producción de metales como quedó demostrado en aguas croatas a la espera de refrendar ese dominio del C-2 en larga distancia en el próximo Mundial de septiembre en Portugal.

Con este reciente oro, Graña deshace a su favor el empate en la especialidad de maratón con Tono Campos. El grovense tras su oro en el C-1 del sábado también superaba la cifra de 20 podios internacionales.