Nadie duda que Cristiano Ronaldo terminará en la Juventus. Sin embargo, la operación que sacará al actual Balón de Oro del Real Madrid depende de varios flecos. Según aseguraron ayer varios medios italianos, Florentino Pérez pide ahora 150 millones de euros por el crack luso, en lugar de los 100 que le fijó como cláusula de rescisión en enero. En Turín entienden esta maniobra como un intento del Madrid por llevar la iniciativa en las negociaciones. Al fin y al cabo, una vez que Ronaldo salga de la Casa Blanca, Florentino Pérez se convertirá en el presidente que permitió la salida del máximo goleador de la historia madridista.

El desembolso económico no es asumible por la Juventus sin realizar algunas variaciones en su plantilla, de las más caras de Italia, para no tener problemas en el cumplimiento del fair play financiero. Si la Vecchia Signora se hace con de Funchal, no solo estaría firmando el traspaso más caro de la historia del fútbol italiano, sino que hipotecaría cerca del 25 por ciento de su presupuesto, que ronda los 500 millones de euros, en un jugador de 33 años. Se estima que el traspaso de Ronaldo podría rondar los 340 millones de euros en total, entre el pago al Madrid y su ficha, de 30 millones de euros, mucho más de lo que cobra cualquiera en el Calcio. Por eso, la llegada de Ronaldo aceleraría la operación salida en la Juve. Higuaín es el que más papeletas tiene para salir. Por el Pipita, los italianos tienen una oferta en firme del fútbol chino. Por fechas, tendría que salir en los próximos días puesto que la ventana de fichajes en el Gigante asiático cierra el 31 de julio. El Chelsea es otra de las novias del delantero argentino. La entidad londinense está a expensas de alcanzar un acuerdo con el técnico italiano Maurizio Sarri, que en su día puso en valor a Higuaín cuando todavía jugaba en el Nápoles. Desde Inglaterra se habla de una oferta por el ariete por 60 millones de euros.

Movimientos

Mientras tanto, el Real Madrid aguarda acontecimientos. Aunque diversas fuentes aseguran que estarían dispuestos a aceptar una oferta de 130 millones de euros, lo que el club busca en realidad es que sea CR7 quien diga públicamente que se quiere ir de la entidad. Mientras tanto, el luso guarda silencio. Y su fichaje, más allá de reuniones, se intuye por los efectos que está generando. Sin ir más lejos, ayer la Juventus tuvo que emitir un comunicado después de que el precio de sus acciones se encareciera un 7,33 por ciento en las últimas horas y un 33 por ciento en la última semana, a cuenta de la operación. "Mantenemos abiertas diferentes oportunidades de mercado", explicaron desde el club blanquinegro, después de que la Comisión Nacional para las Sociedades y la Bolsa (CONSOB) -la entidad que regula en Italia los mercados financieros- pidiera explicaciones por tal incremento de valor. "En el momento en que se perfeccionen las operaciones de mercado, el club proporcionará adecuadas informaciones", remataron en ese mismo comunicado el conjunto italiano.