El Celta iniciará el curso 2018-19 con su núcleo de jugadores más importantes protegidos con contratos de larga duración y blindados con altas cláusulas de rescisión. Las excepciones a esta regla son cinco futbolistas que concluyen contrato el próximo año y que el club no ha conseguido renovar (Daniel Wass, Nemanja Radoja, Sergi Gómez Jonny Castro y Borja Iglesias) o que no entran en sus planes de futuro (Andreu Fontás, Theo Bongonda y Borja Fernández). La continuidad del resto del plantel está garantizada, salvo que algún club pague su cláusula o presente una oferta imposible de rechazar.

Con distintos matices, el club celeste ha puesto a los díscolos en el mercado. El Celta espera ofertas por Wass, que ya ha comunicado su intención de salir a un equipo de mayor calado, y ha declarado transferibles a Jonny, Radoja y Sergi Gómez, pero no les facilitará la salida a menos que llegue una oferta lo suficientemente importante. El club vigués ya rechazó, por insuficiente, una propuesta del Atlético de Madrid por el lateral vigués. Sí se darán previsiblemente facilidades de salida a Borja Fernández, cedido el pasado curso al Reus, y Andreu Fontás, que no entra en los planes de Antonio Mohamed, al tiempo que negocia el traspaso de Bongonda al fútbol belga.

Mención aparte merece la situación de Borja Iglesias, que interesa a media Primera División. El Celta quiere contar el próximo curso con el delantero compostelano y le ha presentado una generosa oferta de renovación por cinco temporadas. Iglesias, sin embargo, da prioridad absoluta a jugar y sopesa estos días si vuelve al Celta para disputar un puesto a Maxi Gómez y Iago Aspas o prueba fortuna en un equipo de la máxima categoría -el Espanyol parece ser el mejor situado- que le ofrezca más opciones de disponer de los minutos que busca. Excepcional es también la situación de Gustavo Cabral, que entra en los planes del técnico para cumplir el año de contrato que le resta.

Otros dos futbolistas, el centrocampista Pablo Hernández y el portero Sergio Álvarez, terminan su relación con el Celta en junio del próximo año, aunque en ambos casos tiene el Celta la posibilidad de ampliar de forma unilateral un año más su contrato. El Gato de Catoira tiene una cláusula baja (10 millones), aunque ajustada a su edad y cotización, mientras que la cláusula del Tucu, de quien en Argentina se dice que está en la agenda de Independiente, es de 15 millones.

En 2020 también concluyen contrato el danés Andrew Hjulsager, que en los últimos seis meses ha jugado sin mucho lucimiento cedido en el Granada y tampoco cuenta para el nuevo técnico,; David Costas, a quien se ofrecerá la oportunidad de disputar un puesto; y Facundo Roncaglia, que sí entra en los planes de Mohamed. Sus cláusulas son de 30, 10 y 20 millones, respectivamente.

Aspas (40 millones) y Mallo (30), los dos grandes referentes de la casa, acaban con el Celta en 2021, lo mismo que Pione Sisto (40), que estos días disputa el Mundial de Rusia con Dinamarca y ha insinuado (sin ofertas de momento) la posibilidad de salir, y Claudio Beauvue (40), cedido el pasado curso en el Leganés, cuya continuidad va a depender, en buena medida, de lo que suceda con Borja Iglesias. Si el compostelano sale, crecen las posibilidades de que el antillano se quede. También termina en 2021 Jozabed, a quien el Celta quiere poner este verano en el mercado.

Tres futbolistas concluyen contrato en 2022: Emre Mor, Maxi Gómez y Robert Mazan. Pese a su decepcionante primera temporada, el Celta tiene depositadas altas expectativas en Mor, que gusta mucho al nuevo técnico, y espera que el próximo curso explote todo su talento. Su cláusula se irá incrementado de forma progresiva desde los 45 hasta los 60 millones cada uno de los cuatro años que le restan de contrato. De Maxi se esperan también grandes cosas, salvo que medie una oferta suculenta, mientras que el futuro de Mazan, que podría salir cedido, va a depender de la continuidad (o no) de Jonny.

Tras la reciente renovación de Rubén Blanco, siete jugadores cuentan con cinco años de contrato, casi todos blindados con altas cláusulas. Además de Blanco (35 millones), figuran en este grupo el también portero Iván Villar (10 millones); el eslovaco Stanislav Lobotka (50 millones), objeto de deseo de importantes clubes europeos; Brais Méndez, la estrella emergente de la cantera (25 millones); y los tres fichajes recientemente incorporados por la dirección deportiva: el defensa central mexicano Néstor Araújo (40 millones), el lateral catalán David Juncà (30 millones) y el centrocampista turco Okay Yokuslu (40 millones).