Un año atrás el Sárdoma correteaba tras Joana Montouto, autora de los dos goles que daban el primer título a las de As Relfas ante el Matamá en O Vao (2-1). Ayer, la imagen fue idéntica porque la delantera cerró con su gol en la muerte súbita de los penaltis la final más emocionante de la historia del fútbol femenino vigués. Aunque para ser justos el mérito estuvo también en Sara Alonso, que paró dos penaltis.
Como un año atrás, el Matamá, que ha hecho un temporadón (cuarto en la Liga y Copa Deputación) cierra la campaña con lágrimas. Su rival ciudadano, en un derbi que ya es clásico, sonríe pese a sus flojos meses finales en la Liga y la eliminación ante el Matamá en las "semis" de la Copa Deputación. Cosas del fútbol.
El Sárdoma retuvo el título de campeón de la Copa Vigo de nuevo ante el Matamá en un partido homenaje al fútbol femenino por el gran ambiente vivido, el juego (a ratos vibrante) y la emoción. Ambos contendientes engrandecieron también el torneo vigués con una tanda de penaltis espectacular (7-6 para las blanquiazules) tras noventa minutos que concluyeron con empate (3-3). Como sucedió en la masculina, el que dio primero golpeó dos veces (el Matamá se puso 0-2)? pero perdió. Perdonó y eso sale caro.
Para empezar, el Matamá agobió la salida que cuando lograba escapar de la presión (pocas veces), se mostraba más peligroso que en otros derbis. Paula probaba fortuna (alto, min. 7) y Joana cabeceaba con intención. El Matamá, que había tenido la primera oportunidad (Nati, de falta, min. 5), rondó el gol con disparo de Noelia Pereira que Sara despejaba para salvar el rebote entre Drus y el larguero.
La batalla era amarilla. Equis no atinaba a repartir juego (uno de sus peores partidos) y Lorena avisaba con otro disparo. El gol estaba escrito. Barrera tímida, llegada tardía a la misma de Equis y habilidad de Nati para tocarla con pasmosa suavidad, toque y elegancia. 0-1.
Tras los dos choques de Liga, otro de Copa Galicia y uno más de Copa Deputación, este era el quinto de esta temporada. El Sárdoma nunca había marcado. Parecía repetirse la historia, y más cuando en pleno descontrol, otra pérdida absurda colocaba en dos pases a Nerea sola para fusilar el 0-2. El Sárdoma hacía aguas.
Pero el Matamá no cerró el partido. Lorena y Noelia tuvieron otras dos ocasiones para fulminar a las de Dani Núñez. Una la salvó Sara, excelente, y otra se fue alta. Y ocurrió una de esas cosas que solo pasan con Joana en juego. En un balón perdido en mitad del campo, ni se lo pensó: zambombazo en globo hacia la portería de una Kily adelantada y 1-2. Quince segundos después la colegiada señalaba el final del primer periodo. Había partido.
En la segunda mitad, todo pudo cambiar en un minuto. Pau tuvo un testarazo casi a bocajarro para dar medio título al Matamá, pero remató flojo y Sara atajó. Después, el torbellino. Núñez, que seguirá el próximo año como primer entrenador sardomista, metió a María Calvar de káiser reordenando la zaga (clave, porque estuvo colosal) y dio entrada a Inés. Acertó de pleno. El Sárdoma se adueñó del choque. Las de David Ferreiro estaban fundidas y en nada, Joana se revolvió en el área para igualar y participó en el 3-2 que Yaiza marcó al segundo intento.
La fiesta cambiaba de parroquia y Joana mandaba otro testarazo intencionado que se iba fuera por nada? Pero ahí pecaron de nuevo. De repente dejaron de crear y las pupilas de Ferreiro tuvieron fe y premio. Noelia empalaba el 3-3 en el descuento. Merecido.
En los penaltis se llegó a la muerte súbita. . Había concilio en mitad del campo para ver quién tiraba. Y miedo. Mucho miedo. 5-5, 6-6? Lorena lanzaba a la derecha de Sara y esta atajaba. Turno para Joana. Gol. Título. Euforia. Es Joa. Otra vez ella.
