Solo una semana después de bajar de ocho horas en el Ironman, el ferrolano Javier Gómez Noya (Basilea, Suiza, 1983) visitó Madrid junto a Sergio Rodríguez y Lydia Valentín gracias a Bridgestone, donde apadrinaron la iniciativa 'Persigue tu sueño, supera los obstáculos'.

"Es muy bonito este evento con gente que nos admira, gente que quiere emularnos, que quiere hacer deporte, que quiere hacer actividad física, superar sus problemas y sus obstáculos fijándose en los tres", indicó el deportista gallego.

- ¿Se les admira poco a los tres?

- Yo me siento muy admirado por mucha gente, especialmente en el mundo del triatlón. Gente que te da ánimos, que te dice que han empezado a hacerlo porque te han visto a ti y que lo que haces es la leche. Eso es muy reconfortante y muy gratificante. Estoy muy agradecido. No estamos todo el día en los medios pero sí que hay gente que nos sigue y yo me siento muy valorado.

- Pero podrían ser mediáticos por lo que consiguen, ¿no?

- Atendiendo a los resultados deportivos, seguro; pero eso no lo es todo. Cada país tiene sus deportes más potentes, con más seguidores, y los nuestros son un poco más pequeños. Van creciendo poco a poco y a lo mejor algún día llegan a ser más grandes.

- La semana pasada se estrenó en un Ironman y terminó segundo. ¿Cómo fue la experiencia?

- Muy bonita, muy dura, un tipo de carrera muy diferente a lo que he estado haciendo hasta ahora. Tuve muy buenas sensaciones y cometí errores tal como esperaba. En una carrera tan complicada que no había hecho nunca tampoco esperaba hacer una carrera perfecta. Me veo con margen de mejora, lo cual es importante. En general haber hecho menos de ocho horas en el primer intento es algo muy bueno y positivo.

- ¿Qué errores se pueden cometer en una prueba así?

- A la hora de alimentarse, de hidratarse, de planificar la estrategia de carrera... Sabes que es una prueba muy larga pero no te das cuenta de lo larga que es hasta que no estás metido. Los diez últimos kilómetros de carrera a pie se me hicieron muy duros. Quizás empecé demasiado fuerte a correr y luego lo pagué. Gestionar todo eso un poquito mejor será importante para las próximas.

- ¿Esperaba un resultado como el que firmó?

- No esperaba bajar de ocho horas pero tal y como fue la carrera creo que puedo ir más rápido que eso porque los diez últimos kilómetros fueron una agonía. Gestionándola de forma diferente podría haber sido un poco más eficaz. Es muy difícil hacerlo y menos a la primera, más cuando estás compitiendo contra gente. Creo que ha sido una buena carrera para aprender.

- A día de hoy tiene entre ceja y ceja el Mundial de octubre y ha aparcado por ello la distancia olímpica. ¿La echa de menos?

- A veces cuando veo algunas carreras de distancia olímpica me gustaría estar pero estoy disfrutando mucho de lo que estoy haciendo ahora. Distancia olímpica he hecho muchos años, he ganado mucho más de lo que esperaba ganar. Ahora es un reto nuevo y eso te da ilusión. No descarto volver a la distancia olímpica pero ahora mismo estoy muy contento con lo que estoy haciendo.

- Más allá de las distancias... ¿Hay muchas diferencias entre una disciplina y otra?

- Sí. La bici cobra más importancia porque no se puede ir a rueda, es muy larga. Estratégicamente son carreras diferentes también. No es un deporte distinto pero sí muy diferente. Soy un novato y me queda mucho que aprender todavía.

- ¿A qué responde este cambio? ¿La necesidad de buscar nuevos retos y salir de la zona de confort?

- Sí. Para cualquier triatleta Hawaii siempre es una carrera muy mítica. Ironman es una distancia muy apetecible para todo el mundo, es un reto. Después de haber conseguido lo que me había propuesto en distancia olímpica y de tener un buen palmarés quizás este año he encontrado el momento de afrontarlo.

- Se han cumplido diez años de Su primer título mundial en distancia olímpica. ¿Ha cambiado mucho?

- No demasiado. Como deportista me he visto obligado a evolucionar porque si hubiese seguido al mismo nivel que hace diez años no ganaría mundiales hoy en día porque todo ha mejorado, las generaciones jóvenes vienen más fuertes. Creo que mi gran éxito ha sido ser capaz de adaptarme a los tiempos, a buscar maneras de mejorar y ser cada vez más eficaz.