La identidad del delantero en su sistema 4-3-3 es una de las pocas incógnitas que Julen Lopetegui parece mantener a diez días del debut mundialista ante Portugal. Muchos analistas nacionales, algunos de ellos todavía dolidos en apariencia por la ausencia de Morata, ponen el foco en la supuesta falta de gol de los tres especialistas convocados por el técnico. Ni siquiera puede asegurarse que el elegido será uno de ellos, pese a la variedad de cualidades que ofrecen. Aspas se mantiene en la carrera por la primera titularidad. Sabe que lo tiene difícil, pero no desmaya. Estadísticas y aficionados lo respaldan.

Lopetegui ha querido recuperar el fútbol más vistoso de Aragonés, con un solo pivote defensivo, pero se mantiene fiel al blindaje de Del Bosque en las conferencias de prensa. El seleccionador se protege de cualquier polémica ametrallando tópicos y vaguedades. Confiesa, sin embargo, las dudas que le acometen con la delantera. "Todavía no lo tengo claro. Ha habido partidos sin una referencia, otros que sí? Veremos una vez estemos más cerca", reconocía el día antes del amistoso contra Suiza. Su cavilación no es reciente. Le ha acompañado durante su todavía breve etapa en La roja. Aduriz, Alcacer e incluso Villa, en una sorprendente reaparición, han participado en el casting.

El test con Suiza no ha revelado nada que sorprenda. Lopetegui ha jugado casi siempre con un ariete de choque y envergadura, fuesen Morata o Diego Costa. Su apuesta por Asensio como falso nueve ante Italia fue puntual, por buscarle las costuras a la rocosa defensa trasalpina. Un delantero más dinámico como Rodrigo o absolutamente liberado de corsés como Iago solo han tenido contadas apariciones en amistosos, bien que exitosas: Rodrigo le marcó a Alemania y Iago a Argentina.

Pero no debe ser solo cuestión del gusto de Lopetegui, ya que éste aún vacila. Y por esa grieta intentará colarse Aspas, que sabe que repetir en banda como ante Suiza será más complicado ahora que Isco se ha incorporado y con Silva indiscutible al otro lado.

La candidatura de Iago Aspas se sustenta sobre sus datos de rendimiento. El moañés supera a sus rivales en el estudio que ofrece Fútbol Avanzado de promedios cada 90 minutos ligueros. El moañés gana en ocasiones de gol generadas (2,04 por 1,1 de Rodrigo y Costa), porcentaje de tiros entre los tres palos del total (46% por 44% de Rodrigo y 40% de Costa), goles sin penaltis (0,59, por 0,49 de Rodrigo y 0,25 de Costa), porcentaje de goles por tiro (22% por 16,5% de Rodrigo y 12% de Costa), porcentaje de pases sobre el total del equipo (7,4% por 7% de Rodrigo y 5,6% de Costa) y asistencias (0,15 por 0,13 de Rodrigo y 0,03 de Costa). Empata con Rodrigo en tiros a puerta (1,3 por 0,84 de Costa) y solo pierde en penúltimos pases de gol (0,12, con 0,16 de Rodrigo y 0,08 de Costa). El céltico se impone también en casi todas las encuestas que la prensa ha efectuada entre los aficionados. Pero ni la frialdad estadística ni el calor de lo que opinen los hinchas anotará el nombre de Aspas en la pizarra del vestuario del Estadio Olímpico de Sochi. Será la mano de Lopetegui, que de momento sigue indecisa.