Borja Gómez, el joven ciclista con Síndrome de Down del C.C. Ponteareas, ofreció hace meses una lección de orgullo que impactó en el mundo del deporte. En Legazpi, sobre un lodazal imposible, el primer deportista con este síndrome que participaba en un Campeonato de España de ciclocross, se dejó el alma por terminar la prueba en la categoría cadete. Pese a sus limitaciones y mientras muchos de sus rivales se retiraban incapaces de vencer al circuito y al barro, Borja no desafalleció hasta que cruzó la línea de meta y se abrazó a quienes cada día le acompañan a entrenar para que haga realidad su pasión irrefrenable por el ciclismo y más en concreto por el ciclocross.

Aquel ejemplo deportivo, que también lo es de actitud ante la vida, le sirvió para ser reconocido con la Beca Vamos (que financian de forma conjunta Cola Cao y el Consejo Superior de Deportes). Esta ayuda, dirigida a niños y jóvenes de toda España de entre 6 y 20 años, que este año destinará 300.000 euros a hacer realidad sueños que inspiren a otros niños a hacer deporte. El enunciado de las bases parecía escrito a la medida de Borja. Difícil encontrar a alguien que pueda inspirar y transmitir a cualquiera con más claridad la grandeza del deporte. Por eso la beca recayó en él y en su club, el C.C.Ponteareas. Borja hizo oficial hace semanas su deseo, que el club de su pueblo dispusiese de un nuevo coche en el que llevar las bicicletas para acudir a las diferentes competiciones en las que participan.

Esa ilusión se hizo realidad ayer en un acto que contó con la presencia como padrino del subcampeón olímpico y cinco veces campeón del mundo de triatlón, Javi Gómez Noya, impactado por la contagiosa energía que transmite Borja.

La entrega del vehículo se convirtió en una fiesta que inundó el centro de Ponteareas y en la que se implicó todo el pueblo, entregado al entusiasmo que irradia Borja Gómez. El joven ciclista y Javi Gómez Noya compatieron numerosas confidencias y gestos de complicidad durante el breve recorrido que realizaron por el centro del pueblo acompañados por el resto de integrantes del club y por ciclistas de otras escuelas que se sumaron a la celebración.

Javier Gómez Noya también dedicó un tiempo de su visita a la localidad a compartir su enorme experiencia con los más de 200 niños presentes en el acto. El gallego les habló de sus inicios en Ferrol y animó a los chavales a que hagan realidad sus sueños a través del deporte. Ellos lo tienen bastante fácil para conseguirlo. Los días que las fuerzas, las ganas o la cabeza flaqueen, solo tienen que buscar a su lado a su compañero Borja. Él se encargará de contagiarles.