El base español Ricky Rubio tuvo el partido de su vida en el tercero de la eliminatoria de playoffs que los Jazz de Utah ganaron por 115-102 a los Thunder de Oklahoma City al aportar su primer triple doble en la fase final y quitarle el protagonismo al base Russell Westbrook, que prometió "venganza".

Rubio, que hizo la mejor versión del legendario base John Stockton, y puso de pie a los 18.306 aficionados de los Jazz que presenciaron el partido, algo que no sucedía desde el 2001, aportó 26 puntos, 11 rebotes --10 defensivos--, y dio 10 asistencias, en los 37 minutos que disputó.

El jugador de El Masnou, que también le ganó el duelo individual a Westbrook, que respondió al concluir el partido con la amenaza deportiva y la promesa que lo va a "anular" en el próximo partido, anotó 9 de 18 tiros de campo, incluidos 2 de 9 triples, y 6 de 7 desde la línea de personal.

Además recuperó dos balones, perdió cuatro, puso un tapón y le señalaron apenas una falta personal. El triple-doble de Rubio fue el primero que consigue un jugador de los Jazz en los playoffs desde que lo hizo Stockton en la serie que disputaron ante los Mavericks de Dallas, en el 2001.

Con una desventaja de 43-47, Rubio anotó 10 puntos consecutivos para los Jazz que se pudieron al frente del marcador 53-49 para ya no perderla el resto del partido. El triple de Rubio y los tiros de personal fueron los que dieron la energía y la confianza necesaria a los Jazz en el campo y la energía a los aficionados en las gradas, que a la petición del jugador español con los brazos en alto desde el medio de la cancha que apoyasen, respondieron con el cántico de "RU-BI-O¡ RU-BI-O¡".

Era la noche soñada por Rubio, que jugó su tercer partido de playoffs en los siete años que lleva en la NBA, después de haber estado las seis temporadas anteriores con los Timberwolves de Minnesota.