Dos temporadas y 458 millones de libras (526 millones de euros) invertidos después, Pep Guardiola ha conseguido el gran objetivo que marcó a su llegada a Inglaterra en verano de 2016: ganar la Premier League, y hacerlo con su fútbol. El United falló en un nuevo intento de aplazar el alirón de sus vecinos. Los de Mourinho perdieron 0-1 en casa ante el West Bromwich Albion, el último clasificado de la tabla. Los 'celestes' se coronaron como nuevos reyes de Inglaterra sin jugar.

La segunda campaña de Pep en las islas ha sido plácida en lo futbolístico -tiene 16 puntos de ventaja sobre el segundo a falta de cinco partidos-, pero movida y polémica en lo personal; sobre todo por la decisión de lucir en su vestimenta el controvertido lazo amarillo. La Federación Inglesa acabó por multarlo a comienzos de marzo con 20.000 libras (22.500 euros). El asunto, que ha movilizado a gran parte de la afición del City, que no ha dudado en ponerse del lado de su entrenador, ha acabado por convertirse en una cuestión casi de Estado y recurrente tanto para los medios británicos como los españoles e internacionales en las ruedas de prensa.

También ha despertado cierto recelo en las islas el elevado desembolso realizado por el equipo inglés en los 19 meses de reinado de Guardiola en Manchester para reforzar la plantilla. Desde verano de 2016 han llegado al Etihad Stadium jugadores de la talla de Aymeric Laporte (65 millones), Benjamin Mendy (57), John Stones (55), Kyle Walker (51), Leroy Sané (50), Bernardo Silva (50), Ederson (40), Gabriel Jesús (32), Danilo (30), Ilkay Gündogan (27), Claudio Bravo (18) y Oleksandr Zinchenko (2), además de Nolito (18, ahora en el Sevilla), Douglas Luiz (12, cedido en el Girona) y Marlos Moreno (5, en el Flamengo).

Sin embargo, polémicas aparte, el segundo año del técnico catalán en Inglaterra ha sido excelso, y sólo las derrotas a manos del modesto Wigan Athletic (1-0) en los octavos de final de la Copa de Inglaterra (FA Cup) y ante el Liverpool (3-0, en la ida de cuartos de la Champions; y 1-2 en la vuelta) han sido un ligero tachón en su impecable hoja de servicios.

"Es imposible describir con palabras lo que sientes. Es un gran logro. He tenido la suerte de ganar tres, pero también he perdido algunas. Nunca he podido defender el título y ahora quiero ver si este equipo puede hacerlo", expresó El defensa belga Vicent Kompany, capitán del Manchester City,en la cadena británica Sky Sports.