La decisión de la Liga de denunciar ante el Comité de Competición la forma en que Borja Iglesias celebró su gol al Nástic de Tarragona, mandando callar a uno de los fondos del Nou Estadi, ha causado indignación en el club maño. También son muchos los aficionados tanto zaragocistas como célticos que han manifestado su solidaridad con el delantero, cedido por el club celeste al aragonés.

Sucedió en el encuentro del pasado sábado entre el Nástic y el Zaragoza. Borja Iglesias, que había sido insultado por un sector de la afición local, marcó en el minuto 58, picando el balón por encima del portero tarraconense. Era el 0-2. El delantero santiagués corrió en paralelo al fondo llevándose el índice a la boca. Su celebración concluyó cuando los compañeros empezaron a llegar para abrazarlo.

Extrañó la celebración de Iglesias por su gran comportamiento habitual, tanto dentro como fuera del campo. El ariete explicaría lo sucedido en declaraciones que recoge El Heraldo. "Fue duro escuchar toda la noche, sin motivo alguno, insultos personales y alusivos a mi familia. Si alguien se sintió ofendido por mi gesto, le pido perdón sinceramente. El gesto, que surgió espontáneamente en ese momento de alegría por el gol, era para los que me insultaron fuertemente durante el partido, no para todo el mundo. Insisto en pedir disculpas al resto de la gente".

La Liga de Fútbol Profesional decidió denunciar el martes a Borja Iglesias ante el Comité de Competición, dependiente de la Real Federación Española de Fútbol. La entidad que preside Javier Tebas ofreció un texto explicativo en el que recuerda que "el pasado 7 de febrero de 2018 (tras un gesto similar del barcelonista Piqué en el campo del Espanyol), la Liga emitió nota pública informando que, a partir de entonces, cualquier celebración ofensiva de gol que pudiera generar crispación en el público o que se considerara como contraria al buen orden deportivo, aun cuando no fuera reflejada en el acta arbitral, se trasladaría a este Comité, para la depuración de las responsabilidades disciplinarias oportunas". Iglesias se arriesga a ser sancionado con entre cuatro y doce partidos, y más probablemente con entre uno y tres, según el artículo del Código Disciplinario que se le aplicase. La Liga también menciona en su escrito el atenuante de las disculpas. Isaac Fouto, periodista de COPE con buenas fuentes en el estamento arbitral y los comités, anticipa: "Lo normal: apertura de expediente o info reservada, y luego decidir si eso es un gesto ofensivo. Aún así está el atenuante de la disculpa. No creo que haya sanción".

El Zaragoza ha manifestado en una nota pública su total apoyo al jugador, cuyo gesto considera "una solicitud de respeto hacia su persona y a la afición del Real Zaragoza, ante el inapropiado comportamiento de un sector de la afición del equipo local".

Mientras, en redes sociales, aficionados del Zaragoza y del Celta han manifestado su oposición a que Borja Iglesias pueda ser sancionado por un gesto que en otros casos no supuso condena alguna, desde la icónica celebración de Raúl en el Camp Nou a casos más recientes como los protagonizados por Luis Suárez, Cristiano Ronaldo, Diego Costa o el propio Piqué.