La selección española de fútbol sala empató (4-4) ante Francia en el primer compromiso del campeonato de Europa que se está disputando en Eslovenia, un encuentro en el que España, sin acierto de cara a portería, ha sido muy superior al combinado galo, que sorprendió por su efectividad goleadora y su solidez defensiva.
La mala puntería fue el peor aliado para la siete veces campeona de Europa, que fue a remolque en el electrónico durante todo el encuentro y que se mostró impotente ante la gran efectividad ofensiva de una Francia que debutó en un Europeo y que planteó un encuentro muy férreo en defensa. Pese a la insistencia en los minutos finales, España no obtuvo el premio de la victoria, un triunfo que buscará frente a Azerbaiyán en el siguiente choque este domingo.
Los de José Venancio comenzaron proponiendo mucha fluidez en su juego en los primeros minutos. La solidez defensiva de los franceses se hizo notar. Fue entonces cuando, tras un error de Tolrá, Abdessamad Mohammed sorprendió al combinado español fusilando a Paco Sedano a los ocho minutos. Fue Adolfo el que empató el encuentro al anotar un buen gol llegando desde segunda línea El choque volvió a sus orígenes, con una España volcada en campo rival.
Solano fue otra de las armas españolas en los últimos instantes de la primera parte. El 2-1 se palpaba en Ljubljana pero una buena combinación francesa desembocó en el tanto de Samir Alla que volvió a adelantar a los 'bleus'. Los pupilos de José Venancio siguieron con la misma intensidad aunque con falta de acierto de cara al gol, algo que no echó de menos Francia. España volvió a empatar justo antes del descanso.
El partido se fue con todo por decidir al descanso aunque Francia volvió a sorprender a los 13 segundos con un tanto de Mohoudine que pilló desprevenido al combinado español y Ortiz en propia puerta amplió la ventaja para los franceses que se colocaron 2-4.
Los españoles cortaron la hemorragia merced a un buen taconazo de Solano a pase de Sergio Lozano que hizo recortar distancias. Francia se encerró ante una España asediando al cuadro galo y José Venancio se vio obligado a jugar con Bebe de portero-jugador. El cierre aprovechó una superioridad española y el primer fallo defensivo de los franceses para poner las tablas a falta de dos minutos. Su esfuerzo final no encontró el premio que merecían.
