El presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Ángel María Villar, y su hijo Gorka serán trasladados hoy a la Audiencia Nacional para declarar ante el juez tras su detención el pasado martes por desviar millones de euros de las arcas del ente federativo.

Ambos fueron detenidos en la operación Soule junto al vicepresidente de la RFEF y presidente de la federación tinerfeña, Juan Padrón, y el secretario de esa federación regional, Ramón Hernández Baussou. Los cuatro declararán hoy ante el juez Santiago Pedraz, quien decidirá si dejarlos en libertad o enviarles a prisión provisional.

Los investigadores apuntan a que Villar, que lleva 28 años en el cargo, cobraba comisiones por la celebración de partidos de la selección y se servía de su puesto para la contratación de servicios y otras relaciones comerciales en beneficio de su hijo, abogado experto en derecho deportivo y al frente de varias empresas donde eran desviadas cantidades de dinero.

Villar, el sempiterno presidente de la federación

Villar, el sempiterno presidente de la federación

Tras esquivar en los últimos años varios escándalos de corrupción, como el caso FIFA, Ángel María Villar, de 67 años, fue arrestado en una investigación que se inició a raíz de una denuncia del Consejo Superior de Deportes (CSD) presentada en 2016 tras apreciarse que no se había cobrado una deuda de 24 millones de euros contraída por la empresa Santa Monica Sports por los derechos audiovisuales de los partidos de la selección.

Además de no cobrar esa deuda, cuando la Federación decidió romper con Santa Mónica en 2013 la entidad de Villar habría indemnizado a la empresa con más de 20 millones de euros.

Esas irregularidades habrían sido apreciadas por la auditoría del CSD y, ante la negativa de la Federación a dar explicaciones, el entonces responsable del Consejo, Miguel Cardenal, decidió denunciar los hechos.

Fue el detonante de una investigación de la UCO y la Fiscalía Anticorrupción que se saldó con los cuatro arrestos, entre ellos el de Juan Padrón, al que los investigadores otorgan un papel determinante en las prácticas corruptas de la Federación.

Entre ellas, algunas afectarían a las federaciones de Andalucía, Comunidad Valenciana, Baleares, Las Palmas, Tenerife, Extremadura, Ceuta y Melilla, algunos de cuyos presidentes ya han declarado ante la UCO aunque no han sido detenidos.

Se les permitía contratar con sociedades de su entorno o de su propiedad, con lo que obtenían un beneficio propio e incluso desviaban fondos de la Federación. La sospecha es que, a cambio, Villar se aseguró su apoyo en las sucesivas elecciones.

Los investigaciones no tienen duda sobre uno de los partidos, el que enfrentó a España contra Corea del Sur en 2012 en la preparación de la Eurocopa que ganó la selección española.

Pero se investigan más casos, algunos de ellos en América Latina, donde Gorka Villar dirigía la Confederación de Fútbol Sudamericana (Conmebol).

Son solo algunas de las presuntas prácticas corruptas que investiga la UCO y la Fiscalía, pues de los registros y de la documentación intervenida en la operación Soule han encontrado "mucho de lo que tirar", según las fuentes consultadas por Efe.