La selección española femenina de fútbol iniciará hoy con un derbi ibérico ante la escuadra portuguesa su participación en la Eurocopa de Holanda, torneo al que llega con una mezcla de ilusión y de prudencia dado su estatus de aspirante, todavía no de candidato.

"No tenemos que olvidar que somos séptimos en el ránking UEFA", remarcó el técnico español, Jorge Vilda, en su última rueda de prensa en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas (Madrid). "Hay selecciones que han dicho que quieren ganar la Eurocopa. Nosotros nos centramos en ganar el primer partido ante Portugal", añadió.

Si Alemania, Francia o Inglaterra ansían el cetro europeo, la aspiración del equipo español es ratificar su evolución ante las mejores escuadras del continente en un certamen que empezó el pasado día 16 de julio y que continuará hasta el 6 de agosto. La delegación española, en la que figura la arousana Mari Paz Vilas, pisó el lunes suelo holandés tras alargar durante tres semanas su concentración en la sede federativa.

A su debut, previsto para hoy en Doetinchem, se presenta aupada por su reciente éxito en la Copa Algarve, el primero en la historia de la selección española en categoría absoluta, aunque anteriormente había firmado una inmaculada fase de clasificación para la Eurocopa con ocho triunfos en otros tantos compromisos. Así advertió de su mejora.

"Nos ha traído hasta aquí un estilo de juego propio, nuestro carácter, nuestro sacrificio y nuestro trabajo", destacó la jugadora del Atlético de Madrid, Marta Corredera, en la primera comparecencia de las internacionales españolas en Epe, su lugar de concentración durante el torneo. "Si demostramos todo eso en el campo y hacemos lo que venimos haciendo en la fase de clasificación y en todos los amistosos previos creo que las cosas van a ir bien", abundó.

Tras lograr la medalla de bronce en la cita continental de 1997 y alcanzar los cuartos de final en el torneo disputado en Suecia hace cuatro años, el fútbol femenino español abre un nuevo periodo en el marco internacional bajo la dirección de Jorge Vilda, un técnico laureado en categorías inferiores que en el verano de 2015 aceptó el desafío de trasladar esos éxitos a la máxima categoría.

No quiere, sin embargo, hablar de expectativas. "No me gusta poner objetivos más allá del primer partido que sabemos que es muy determinante y en eso es en lo que estamos centrados, en el partido ante Portugal", recalcó Vilda en una entrevista publicada en el portal digital de la UEFA.