"Puede haber malas rachas, pero el equipo siempre se recompone y está ahí. Hoy ha sido un ejemplo", explica Prades sobre el último partido. "El Granollers también ha jugado un buen partido, independientemente del resultado final. Pero nosotros hemos seguido creyendo, hemos seguido insistiendo en un partido que no era fácil jugar".

"Le daremos mucho más valor cuando pase el tiempo", declara sobre el título. "Hemos hecho una segunda vuelta muy buena, sin perder un solo partido, al alcance de muy poquitos. Hemos superado muchas expectativas. Las únicas protagonistas son las chicas, que se han comprometido muchísimo, han trabajado lo que no se ha escrito. Estoy superfeliz por ellas. Han hecho un esfuerzo tremendo".

Se deshace en elogios hacia la afición: "No hay igual en España, con todos mis respetos para todo el mundo. Por cómo se vive aquí el balonmano y cómo se comporta la afición del Guardés, esa simbiosis tan perfecta, en ningún sitio la hay".

Enumera sus dedicatorias: "A mi mujer y mis hijos, que son los que más sufren el día a día. Y al presidente, que lleva muchos años dejándose la salud en los viajes, haciendo muchos kilómetros esperanzado por que el equipo de su pueblo ganase algo. La junta directiva trabaja muchísimo".

"Todavía tardaremos un poco en que baje la adrenalina. Es una emoción? A veces no encuentras los adjetivos para determinadas situaciones y esta es una de ellas. Viendo la felicidad del ambiente, de las jugadoras, de la afición, estoy muy contento con lo que nos rodea", exclama. "Vamos a disfrutar unos cuantos días. Es muy difícil que se vuelva a repetir. A partir de ahí trabajaremos en la próxima temporada".