Resultó una jornada plena de emoción en las pistas ferrolanas del estadio de A Malata, al disputarse los clásicos Campeonatos de Galicia de Clubes. Dadas las bajas sufridas a causa de fichajes de otros clubes, había pocas esperanzas en la actuación de los dos equipos del Celta, que el año pasado, en Lugo, conquistó una doble victoria colectiva. Pero en la realidad de la competición y por el formidable rendimiento de sus atletas de ambos sexos, el Celta ha logrado dos segundas posiciones que son todo un elogio para su esfuerzo individual y colectivo. Los celestes se sienten realmente satisfechos de la labor que en Balaídos se realiza.

Clasificación masculina: 1º Sociedad Gimnástica 144 puntos; 2º Real Club Celta 106; 3º Narón 96; 4º Santiago 93; 5º Lucus 80; 6º Adas 71; 7º Riazor 62; 8º Marineda 36.

La Gimnástica, un División de Honor del atletismo nacional, impuso su superioridad, mientras que los célticos se alzaron con un segundo lugar quizás inesperado, destacando las primeras posiciones individuales de Gonzalo Basconcelo con 4.11,5 en 1.500 metros y Miguel Cajaraville 4,50 en pértiga.

Clasificación femenina: 1º Ría de Ferrol 143 puntos; 2º Club Atletismo Femenino Celta 121; 3º Gimnástica 113; 4 ºAdas 104; 5º Lucus 85; 6º Santiago 68; 7º Marineda 66; 8º Sada 32.

Otro División de Honor, el Ría ferrolano, conquistó el triunfo con cierta holgura, pero las célticas hicieron un esfuerzo extraordinario y se logró dos primeras posiciones individuales, las de la venezolana Nedian Vargas en 100 metros lisos, sin tiempos por el fallo del cronometraje electrónico, y de Raquel Meaños con 2.18,77 en 800 metros.

No fueron dos títulos, como el año pasado en Lugo, pero sí dos platas en el podio que evidencian una plausible tarea y la esperanza de una digna actuación en los Campeonatos de España de clubes, que ya empiezan el próximo fin de semana, porque hay espíritu de lucha y superación en las filas célticas.