El Atlético de Madrid duerme en la tercera posición a la espera de lo que haga hoy el Sevilla ante el Sporting, al ganar ayer al Málaga, conoles de Koke y Filipe Luis, que deja a los malaguistas muy tocados y sin ganar en la era Míchel.

El equipo rojiblanco empezó dominando, con más ímpetu que los malaguistas y avisó con un lanzamiento de Koke, que atajó Kameni.El Málaga se fue rehaciendo poco a poco y aclarando algo el panorama con más presión en el centro del campo para atar a Gabi, Saúl y Koke.

Catorce minutos duró el central Miguel Torres, sustituido por lesión por el uruguayo Federico Ricca, que se situó en la zaga, junto con Luis Hernández y Llorente, con el mismo sistema del principio.

Los malaguistas crecían ante un Atlético de Madrid apagado, pero en una llegada, con Torres en la frontal de espaldas a la portería, gira, el balón queda dentro del área grande y Koke, llega por detrás para cruzar el esférico a la salida de Kameni. No lo merecía, pero la calidad manda y la pegada también.

El Málaga seguía dominando, aunque sin hacer sufrir a Oblak, con un único acercamiento con peligro en un pase por la derecha de Sandro y taconazo de Keko, que frenó el guardameta rojiblanco.

La segunda parte tuvo paralelismos a los primeros 45 minutos, con dominio local sin tirar a portería, sin ideas ofensivas, pero con un Atlético de Madrid bien plantado, rácano en ataque, y sin sufrir en su área excesivamente.

El equipo rojiblanco en la segunda que llegó al área malaguista en el minuto 73, un balón suelto en el punto de penalti, disparó Griezmann, que se marchó fuera pegado al poste derecho.

Pero un minuto después, una jugada de Torres, por la izquierda, habilitó a Filipe Luis, que picó el balón a la salida de Kameni, sentenciando el encuentro.

El Málaga se animó algo con varias acciones con remates de cabeza de Llorente, tras un córner, una vaselina de Sandro, que adivinó Oblak, y un lanzamiento de Santos, que despejó el guardameta.