Mal inicio para la temporada de pesca de la trucha en las comarcas de Deza y Tabeirós-Terra de Montes. El bajo caudal de los ríos y la coincidencia del primer día de la temporada con el Día del Padre contribuyeron a que la jornada se saldase con pocas capturas. En líneas generales, se cumplió el dicho de "a quien madruga, Dios le ayuda". Los pescadores que acudieron antes al río fueron también los más afortunados.

En Deza el inicio de la temporada se vio afectada por diversos factores. El previsibile bajo caudal fue el principal en la escasez de afluencia, pero también lo fue un día tan señalado como el de ayer. Si bien, varios pescadores que decidieron bajar al río sí se quejaron del número de depredadores, tales como nutrias o hurones.

Muchos -ansiosos por matar el "gusanillo" de su pasión por la pesca- acudieron al río en torno a las 7.30 horas. La mañana estaba bastante fría y, por tanto, las aguas también. Además, el caudal iba bajo y las aguas, muy claras. Con estas condiciones, según fuentes de la Sociedad Deportiva Río Ulla de A Estrada, hubo pocas capturas. Donde más se contabilizaron fue en el Liñares. Los más avezados consiguieron hasta 3 o 4 truchas. En el Rubín, el Curantes, el Vea y otros riachuelos del rural de A Estrada los más afortunados apenas llevaban 2 o 3 truchas en su cesto. Además, la coincidencia con el Día del Padre hizo que muchos se fueran en torno a las 10.30 o las 11.30 horas para disfrutar de una celebración en familia.

También hay incondicionales como el mítico pescador estradense Louzao, toda una institución en la materia, que ayer optó por pescar en el Rubín. Los deportistas más jóvenes se concentraron fundamentalmente en los tramos de pesca sin muerte: en el recién estrenado coto de Codeseda y en zonas como Ribela o Arca (en aguas del Umia).

Ya en Forcarei, según fuentes de la Sociedade de Caza e Pesca de Forcarei, apenas hubo capturas. La mañana estaba bastante fría y las aguas también iban muy bajas. Como en A Estrada, los deportistas pescaron mayoritariamente a cebo vivo ("miñoca" y "coco da mel").

En cambio, en Cerdedo, según el presidente de la Unión Deportiva Cerdedo, Javier Rodríguez, dio mejores resultados la cucharilla aunque solo a primera hora. Señaló que la afluencia de pescadores fue "mínima".

Los pescadores de Tabeirós-Montes atribuyen la escasez de capturas a múltiples factores: la sequía de los últimos meses, el bajo caudal de los ríos, los depredadores (como el cormorán o la garza) y la contaminación derivada de purines y depuradoras con deficiente mantenimiento como la de Sabucedo, según el presidente de la Unión Deportiva Cerdedo.

En algunos ríos como el Toxa la afluencia de pesacadores no fue muy abundante, si bien, sí que destacaron el número de picadas, aunque la mayoría de peces tuvieron que ser devueltos al agua debido a su pequeño tamaño. Según indican desde la Sociedad de Caza y Pesca de Silleda explicaron que la mayoría de peces eran de entre 15 y 18 centímetros, por lo que, como manda la normativa, tuvieron que ser devueltos al río.