El ferrolano Javier Gómez Noya, único quíntuple campeón mundial de la historia, abrió ayer una nueva edición de las Series Mundiales de triatlón con un brillante triunfo en Abu Dabi.

Privado por una lesión de la lucha por el oro olímpico en Río de Janeiro, el triatleta ferrolano, de 33 años, exhibió su ambición en el circuito de Yas Marina, sede habitual de una de las pruebas del Campeonato del Mundo de Fórmula Uno.

Medallista de plata en los Juegos de Londres 2012, Gómez Noya, Premio Princesa de Asturias de los Deportes 2016, ya había anunciado en los días previos a esta primera cita de las Series Mundiales su intención de luchar por el que sería su sexto título mundial. Un anuncio al que ayer dotó de mayor entidad con su inconstestable actuación en Yas Marina.

Gómez Noya completó el recorrido -de 1.500 metros a nado, 40 kilómetros de rodaje en bicicleta y unos últimos 10 kilómetros de carrera a pie- en un tiempo de una hora, 52 minutos y 31 segundos.

El británico Thomas Bishop pisó la línea de meta a trece segundos del líder y el francés Vincent Luis fue tercero a 36, con los españoles Fernando Alarza y Mario Mola -defensor del título- relegados al cuarto y octavo lugar, respectivamente.

Aunque estos dos últimos estaban llamados a disputar el triunfo en Abu Dabi, ninguno de ellos pudo alcanzar a Gómez Noya, quien reconoció que se encontró "muy bien" desde el sector de la natación.

El triatleta gallego, quíntuple campeón del mundo, completó los primeros 1.500 metros de la prueba a once segundos del francés Aurelien Raphael, quien invirtió 18 minutos y 27 segundos en el agua, y se acomodó con el grupo cabecero en el sector ciclista, especialmente técnico por la sucesión de curvas.

"Ahí reservé un poco de energía", explicó Gómez Noya. "Sabía que la carrera iba a ser dura", agregó, "pero el cambio llegó en el momento adecuado".

El ferrolano se despojó del marcaje del británico Thomas Bishop a falta de 3.35 kilómetros para la meta y cerró, ya en solitario, un "regreso soñado" al circuito mundial. "Es bonito volver así", dijo.

Tras medir sus apariciones durante la pasada campaña dado su deseo de competir en Brasil por el título olímpico, Gómez Noya regresó a lo grande. Con esta victoria, el español presenta su candidatura para un sexto entorchado mundialista.

El ferrolano indicó tras la carrera que a pesar de cometer "algunos errores" en la que fue una carrera "dura" y "muy técnica", se hizo con el triunfo tras nueve meses fuera de la competición. "Es genial regresar de esta forma. He cometido algunos errores en la prueba; no he nadado muy bien y he hecho una mala segunda transición, pero sabía que iba a ser una carrera dura y con Tom Bishop ha sido muy técnica", señaló tras la prueba.

El ferrolano redujo el ritmo considerablemente durante la prueba para "guardar energía" de cara a la recta final, algo que surtió efecto para finalmente hacerse con el triunfo, el primero de la temporada.

"En la tercera vuelta bajamos mucho el ritmo, intentando guardar energía para la última. Me he escapado a tres kilómetros del final y he ganado, así que ha funcionado. Estoy muy contento de haber vuelto de esta manera", reitera.