El Erizana rompió ayer una racha negativa de doce partidos sin ganar con una goleada frente a un Verín absolutamente desdibujado por el juego de los locales.

El equipo de Baiona necesitaba un triunfo para alejar las dudas que creaban los pésimos resultados Así, los locales buscaron el gol desde el inicio y enseguida lo encontraron en una acción de estrategia. Marcos remató de cabeza en un saque de esquina y adelantó a los locales (1-0, min. 13). Pero el Erizana ayer quería más y así fueron cayendo una a una las ocasiones de gol, tanto en jugadas colectivas, como en acciones individuales. Fue un carrusel de oportunidades y poco a poco fueron llegando los goles. En la primera parte, Víctor logró el segundo y tras el descanso en cinco minutos los locales sentenciaron con tantos de Alex y Zamo.

A pesar de que todavía quedaban 40 minutos por delante, el choque estaba sentenciado y el Erizana amainó el vendaval de juego.