El cierre del mercado de fichajes de invierno se presume muy agitado para el Celta, como ocurrió cuando Fabián Orellana convenció al Granada para que lo traspasase al equipo vigués. A última hora del 31 de enero de 2013, se acordaba el regreso a Vigo del internacional chileno. Es más, el Celta anunció oficialmente su compra -1,2 millones de euros de desembolso y el 40% de un hipotético traspaso para el Granada- a la una de la madrugada del 1 de febrero. Dos años después, y tras ser declarado transferible por el club ante las quejas del técnico por indisciplina, el destino del suramericano continuará en el aire probablemente hasta última hora de hoy.
La atención de esta jornada, sin embargo, no estará centrada solamente en Orellana, por quien el Valencia está dispuesto a abonar una cantidad económica que no satisface de momento al Celta. En Plaza de España, anunciaban esta mañana la incorporación del mediapunta danés Andrew Hjulsager, que habría solicitado Berizzo con insistencia. Además del argentino Ricky Álvarez, la atención céltica también se dirige hacia Wahbi Khazri, centrocampista del Sunderland que pasó por el Bastia francés, para reforzar una plantilla a la que llegó Jozabed Sánchez, cedido por el Fulham. Se han marchado José Naranjo, traspasado al Genk belga, y David Costas, cedido al Oviedo.
En el club vigués, no obstante, consideran que la plantilla mantendrá buen nivel aunque no llegue otro refuerzo, pues se espera que Beauvue reaparezca pronto, con lo que Berizzo dispondría de otro ariete o jugador de banda.
