El Deportivo empezará a hacer frente este año a la deuda concursal ordinaria y la privilegiada que contrajo con las entidades financieras, Abanca y Sabadell Gallego, un compromiso de pagos que se suma al recogido en el convenio singular que acordó con la Agencia Tributaria en marzo de 2014 y que lleva cumpliendo desde entonces.

El club se vio abocado a entrar en concurso de acreedores en 2013 con 160 millones de euros de deuda que se quedaron en 140 con la quita del 33 % que pactó en el convenio que se firmó en enero de 2014, todavía con Lendoiro como presidente, y que incluía, además, dos años de carencia y 17 años para abonarla sin intereses.

De la deuda concursal, 100 millones de euros tenían carácter privilegiado (sin quita), 30 correspondían a la deuda ordinaria (sujetos a la quita del 33 por ciento), y otros 30 fueron considerados como deuda subordinada (con quita del 33 por ciento), que empezará a pagar a partir de 2032.

Ya con Tino Fernández como dirigente, el club acordó en marzo de 2014 el convenio con la Agencia Tributaria, su principal acreedor, en relación a la deuda privilegiada, con un interés nominal anual aplicable del dos por ciento y que se comprometió a abonar a partir de enero de 2015 con dos cuotas por temporada hasta 2023 siempre que el club se mantuviera en Primera.

En julio de 2015, el Deportivo presentó el acuerdo con Abanca y Sabadell Gallego para refinanciar la deuda de 14 millones de euros que mantenía con ambas y que acabará de pagar en 2032. El Deportivo explicó entonces que la estructura de amortización era progresiva, con una menor carga en las primeras temporadas y una mayor en el último tramo del préstamo, una vez que el club cumpliera la amortización de la deuda privilegiada con la Agencia Tributaria, en el año 2023 (siempre que se mantenga en Primera). Hasta enero de 2023 el capital a amortizar de manera ordinaria es de un 20 % y, en el tramo final, entre julio de 2029 y julio de 2031, de un 40 %. En virtud de ese convenio, el vencimiento de la operación quedó fijado en la temporada 2031-2032, con un periodo inicial de carencia hasta enero de 2017.

Además de esa deuda con los bancos proveniente de un préstamo sindicado, el Deportivo tenía que hacer frente a un préstamo bilateral con Abanca por importe de 13 millones que fue refinanciado hasta 2029 con la firma de un contrato publicitario con la entidad bancaria que cancela anualmente cuotas.

"Si seguimos así, en tres años, lo gordo, se ha acabado. Seguirá habiendo deuda, pero mucho más asumible", comentó el presidente del Deportivo, Tino Fernández, en la última asamblea. Aseguró que el club está "obligado a generar grandes beneficios" por el calendario de pagos que debe afrontar a partir de ahora. El objetivo del club será "recuperar el equilibrio patrimonial" después de haber cerrado el ejercicio 2015-16 con un descenso del patrimonio neto negativo de 90,57 millones de euros a 83,49. El pasivo del Deportivo se situaba el pasado 30 de junio en casi 115 millones de euros, de los cuales 82,87 corresponden a deuda a largo plazo y 9,96 están incluidos como deuda a corto plazo.