Alondras y Villalbés, disputaban la última jornada de la primera vuelta, antes del parón navideño, cosechando ambos conjuntos un punto, que por la situación en la tabla le sabe algo mejor al cuadro visitante. Los dos contendientes, no ofrecieron un buen partido, que fué empeorando con el paso de los minutos.

El Villalbés, se presentaba en Cangas, con el papel de ser uno de los equipos más regulares hasta el momento de la presente campaña, pugnando y ocupando en muchas jornadas el liderato. Sin embargo, visto lo ofrecido sobre el terreno de juego, no dió muestras del porqué su puesto en la clasificación. El Alondras por su parte, venía de cosechar una importante victoria a domicilio, la jornada anterior, pero una vez más como local, volvió a ofrecer carencias en su juego, en parte por la gran cantidad de bajas que acumula, careciendo de una referencia en ataque.

Ese hecho hizo que José Manuel Duarte, apostara por replegar un poco a su equipo en su propio campo e intentar aprovechar alguna contra, con la velocidad de su hombres de ataque. Con algo más de posesión, el Villalbés sin espacios, no encontraba la manera de crear algo de peligro. Tanto Martín, como Marcos, apenas tendrían que intervenir durante los noventa minutos. A pesar de no contar con gran envargadura entre sus hombres, el Alondras solamente inquietaba algo en balones colgados o a balón parado, en parte por la poca seguridad que daba el cancerbero Marcos en el juego aereo.

Eran los únicos recuroso a los que podían agarrase, tanto unos como otros, ya que por juego ninguno de los dos era quien de enlazar algún tipo de jugada. Una primera mitad regular, daba paso a un segundo acto, que fué a menos. Mucha interrupción, mucha falta señalada y sin noticias en ataque por parte de los dos equipos. Conforme se acercaba el final, alondristas y racinguistas, comenzaron a dar por bueno el empate.

Quién rondó más la meta contraria en esos minutos finales, sería el Alondras, pero a base de centros laterales.